Dr. Jorge A. Lera Mejía

Desde la toma de protesta en octubre del 2022, el gobierno de Tamaulipas da atención especial a una problemática que es muy sensible y riesgosa en territorio estatal, me refiero a la crisis de éxodos migratorios a través de los 43 municipios del estado, principalmente los que son registrados en los 9 municipios de la frontera, siendo los más peligrosos y visibles, los que utilizan a Matamoros, Reynosa y peor aún, los municipios de la frontera chica o ribereña que trasciende son utilizados como casas de seguridad.

Así desde 2022 se ratificó en Tamaulipas el Instituto Tamaulipeco de Apoyo al Migrante (ITAM), mismo que tiene presencia y oficinas desde Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Victoria y la zona conurbada.

Debemos recordar que la crisis migratoria, no sólo incluye al más de un millón de transmigrantes centroamericanos, América Latina, Caribe, África y Asia; también debemos subrayar que, por cada transmigrante extranjero, se contabiliza un emigrante mexicano, debido que al año cruzan cerca de un millón de diásporas extranjeras y medio millón de emigrantes mexicanos en la búsqueda del mal llamado «Sueño Americano» que en los últimos años se convirtió en una auténtica «Pesadilla Mexicana».

Por ello, es subrayable qué el gobierno de Américo Villarreal Anaya se preocupe y ocupe en atender este flagelo que ha permitido qué en Tamaulipas se hayan registrado verdaderas tragedias al calor del tema migrante.

De hecho, el pasado 30 de noviembre, el gobernador se hizo acompañar del Comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño Yañez, en Nuevo Laredo arrancaron el Programa Bienvenido Paisano, para atender y facilitar los cruces de nuestros propios migrantes que vienen a pasar las fiestas navideñas a sus lugares de origen.

En esta ocasión, el pasado miércoles 17, el gobernador se volvió a reunir con el Comisionado del INM en la capital, con la finalidad de evaluar el «Programa estatal de Disuasión» de las corrientes migratorias a través de tierras tamaulipecas.

En la reunión, el delegado en Tamaulipas del Instituto Nacional de Migración, Seguismundo Doguín Martínez informó que, al 15 de abril del presente año, la población en el albergue Alfredo Pumarejo, el cual le fue cedido en comodato a la Casa del Migrante de San Juan Diego, es de 679 migrantes, de los cuales 316 son varones, 234 mujeres y 128 menores de edad.

Agregó que con el apoyo de la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Estatal y personal de la Fiscalía General de la República, se ha trabajado en el despliegue operativo para el rescate y apoyo de personas extranjeras que cruzan por territorio tamaulipeco y se ha disminuido el número de migrantes irregulares en el estado, lo cual se ha visto reflejado también en las estadísticas de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos.

El comisionado Garduño Yáñez estuvo acompañado en esta reunión de trabajo por Héctor L. Martínez Castuera, director general de Coordinación de Oficinas de Representación del INM; Andrés Vida Islas, director de Control y Verificación Migratoria; Seguismundo Doguín Garay, asesor de la Oficina del Comisionado; Carlos Vázquez García, director de la Unidad de Política Migratoria y Marcela Rueda Luna, sub representante federal del INM en Tamaulipas.

Por parte del gobierno de Tamaulipas, participaron: Héctor Joel Villegas González, secretario general de Gobierno; Sergio Chávez García, secretario de Seguridad Pública; Jorge Cuéllar Montoya, secretario Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública y Ricardo Guerrero Morales, jefe de la Oficina del Gobernador.