CUADRANTE  POLITICO…

POR: FERNANDO  ACUÑA PIÑEIRO.-

 

   Los ricachones que  ya se lamían los bigotes  por el gran negociazo, derivado de la construcción del aeropuerto en Texcoco, organizaron  una marcha anti  AMLO.

   Se dijo que participaron cerca de cinco mil, lo que sí fue muy notorio es que   sus mantas fifí olían a perfumes caros, y que más  allá de su libre derecho a  expresar  sus diferencias, en el tema especifico de la terminal aérea, lo que más  llamo la atención, fue el desfile   de marcas  tipo Prada, Versace, Armani y Luis Vuitton.

Habrá que estar muy pendientes de lo que viene, porque ya desde  ayer,  se desató una campañita con fotos   de  la citada caminata, y en la cual  buscan relacionar  al próximo gobierno  obradorista, con el régimen de Nicolas  Maduro, en Venezuela.

Lo cierto es que  una buena parte  de la oligarquía, apapachada por el Peñismo, está dolida, porque los suculentos  contratos   de Texcoco, no siguieron  su  curso.

 Estos ricos, no se resignan a aceptar que, el pueblo votó por una opción diferente  de gobernar, porque los sexenios del PRIAN, no respondieron a las demandas  ciudadanas, y todo lo contrario: erosionaron  a las clases  medias, y aumentaron la pobreza extrema del país.

  La pregunta que para efectos  de análisis, se impone  es: ¿Y ahora que es lo que sigue, en cuanto a tratar  de descarrilar  el  gran proyecto social  del obradorismo? Este fin de semana, la clase pudiente movió ya sus piezas en las calles. Fueron pocos, es cierto, pero el número   no es lo que importa, sino quienes  son los que están atrás  de ellos.

  Buena parte de las diez familias más  ricas del país, esas que  hasta ahora se han negado a  pagar impuestos, pretenden  doblar  al próximo gobierno de  Andrés  Manuel  López  Obrador. Lo acaban de intentar en el tema de Texcoco, donde se les fueron miles  de millones de pesos, que ya daban como suyos.

 Pero vienen  nuevas batallas: una de ellas, podría ser  en el tema fiscal, cuando  el  sexenio morenista les exija aportar vía  Secretaría  de  Hacienda, el cumplimiento de sus obligaciones  tributarias.

 La banca extranjera en México, esos que ahora  controlan el tema financiero en el país, por la vía de una política anti social, y  sobresaturada de comisiones que lesionan el interés  de los cuentahabientes, también le  han entrado a  las patadas por debajo de la mesa.

   Recientemente, instituciones como  BANCOMER   enviaron millones  de mensajes  a sus clientes, comunicándoles, que por el tema  del aeropuerto, las inversiones  a mediano y largo plazo,  se verían afectadas.  

Ya  desde  ahorita, antes  de que inicie oficialmente  el gobierno  de AMLO, la ultraderecha  prepara sus armas. Pecarán de ingenuos aquellos que  se empeñen en afirmar que, no pasará nada. Lo que se avecina  en nuestro país, es uno  de los  capítulos más complejos, por

la dimensión de los intereses que están en juego.

  Hasta ahora, un pequeño grupo de familias adineradas habían decidido el rumbo de la república. Y no están dispuestas  a soltar el timón  de sus privilegios. 

—-¿UNA  “CONGELADORA”  DE LUJO PARA EL GUASÓN?–

  Héctor  Garza  González, fue designado este fin  de semana,  como  Oficial  Mayor  de la  Secretaría  de  Educación Pública, en el país. ya se esperaba que le dieran  un cargo administrativo, en función a  su cercanía con el Próximo Presidente de  la república.

¿Cuáles  son las posibilidades del Guasón, en materia política, a la luz de su nuevo nombramiento  federal?  Nos parece que, AMLO le está pagando  puntualmente  su lealtad  y su cercanía.

Pero..¿que hay sobre  sus posibilidades  por la próxima candidatura a gobernador? Más bien da la impresión de que lo sacan de la jugada tamaulipeca, al menos por ahora, pero al mismo tiempo,  se lo llevan por la puerta grande de un cargo importante, en el tema educativo.

¿Una congeladora  de lujo para  el Guasón? Posiblemente. Pero indudablemente que dicho puestazo, ya lo quisieran muchos. En hora buena para don Héctor.  Y esperamos que, a partir de diciembre, haga un buen papel, en su nuevo cargo.

Por lo demás, el largo camino de los morenistas rumbo al 2022, aun les  reserva fuertes  pruebas, no de velocidad, sino de resistencia.