Por: José Medina

Ciudad Victoria.- Blanca Aurelia Anzaldúa Nájera diputada local de Morena, consideró justo, necesario y trascendente, que esta Soberanía inscriba con letras doradas en el Muro de Honor del Congreso del Estado, el nombre de la Benemérita Escuela Normal Federalizada de Tamaulipas, como símbolo eterno de gratitud del pueblo tamaulipeco por sus 135 años de excelencia educativa, formación de generaciones de profesionales de la educación y compromiso con el futuro de Tamaulipas y de México.

«En Tamaulipas, tierra de historia, de gente noble y trabajadora, también florece la educación como instrumento de transformación social, en este contexto, la Benemérita Escuela Normal Federalizada de Tamaulipas, con sede en Ciudad Victoria, representa un verdadero símbolo del compromiso con la formación de profesionales de la educación con visión humanista, arraigo en los valores cívicos y profundo vínculo con el pueblo», resaltó.

Fundada en 1888 por el Ing. Luis Puebla y Cuadra, quien con sensibilidad social se preocupó por la educación de las y los hijos de trabajadores de la Hacienda de Dolores, en Padilla, esta institución centenaria, nació con una vocación genuina de servicio, justicia y esperanza, y desde entonces, ha evolucionado, resistiendo los embates del tiempo y se ha consolidado como una de las escuelas normales más emblemáticas del país.

A lo largo de sus 135 años como institución pública, ha formado generaciones de maestras y maestros que han contribuido al engrandecimiento educativo de Tamaulipas y de todo México, toda vez que, hoy en día, personas egresadas de esta casa de estudios ejercen su vocación en cada rincón de nuestra patria, en aulas rurales y urbanas, en comunidades indígenas, en zonas marginadas y en grandes ciudades, ,llevando consigo conocimiento, valores, disciplina y sobre todo, esperanza.

Anzaldúa Nájera, subrayó que las y los docentes formados en esta noble escuela, son transmisores de saberes, agentes de cambio, líderes sociales, servidoras y servidores públicos ejemplares y pilares en la construcción del tejido social; su legado, se refleja en figuras como el ex Presidente de México, el Lic. Emilio Portes Gil, el ex Gobernador Ing. Américo Villarreal Guerra, la Profa. Beatriz Anaya Guerrero, el ilustre educador Prof. Francisco Nicodemo; la incansable promotora cultural, Doña Amalia González Caballero de Castillo Ledón, entre muchas otras personalidades que han dejado su huella en la historia nacional.

Pero además de su legado histórico, la Normal mantiene vigente su liderazgo académico, ya que, en 2022 en Colombia, fue reconocida internacionalmente con el Premio Mundial de la Ciencia Eureka, otorgado por el Consejo Mundial de
Académicos e Investigadores Universitarios (COMAU), por su excelencia educativa y su impacto en la formación de generaciones con alto sentido humano. Asimismo, ha sido pionera en certificaciones de calidad educativa, como las otorgadas por los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior.

Esta Benemérita institución, es también parte de la memoria arquitectónica e identidad urbana, misma que ha tenido seis sedes a lo largo de su historia, siendo la actual inaugurada el 4 de febrero de 1993, gracias a la visión del entonces Gobernador Constitucional del Estado, el Ing. Américo Villarreal Guerra, cuyo compromiso con la educación vive hoy en su hijo, nuestro amigo el Dr. Américo Villarreal Anaya, Gobernador Constitucional de Tamaulipas, quien desde el primer día de su gestión, ha impulsado una transformación con principios humanistas, donde la educación vuelve a ocupar el centro de las políticas públicas.