DE PRIMERA …LA DAMA DE LA NOTICIA
ARABELA GARCIA
«Los culpables del ABC se esconden, los regidores de Morena en Matamoros, también»
Mientras la justicia llega tarde, en Matamoros la ineptitud llega puntual al cabildo
Mientras el gobierno federal presume que ahora sí, 16 años después, ya agarraron a una de las responsables del caso ABC, los padres de las víctimas no saben si llorar, agradecer o reírse con sarcasmo. Porque no nos hagamos: esa justicia llega con retraso, recorte y pretexto. Como todo en este país, la justicia también se ampara, se negocia, se disfraza. Y cuando por fin la encuentran, resulta que la sentencia de 28 años ya va en 5. ¡Vaya oferta de liquidación judicial!
Pero eso sí: en conferencia de prensa, todos se dan golpes de pecho y prometen justicia divina. No es por intrigar, pero con un país donde hay que rogar para que un juez haga su trabajo y donde una tragedia infantil sigue siendo usada como ficha política… ¿de verdad alguien cree que ya se hizo justicia? El caso ABC es la herida que no sana, porque la impunidad es política de Estado.
Ahora, hablando de tragedias, vamos al cabildo de Matamoros. Ahí tenemos otro incendio, pero de ridículo institucional. ¿Qué hacen los regidores de Morena para apoyar al alcalde? Nada. ¿Qué aportan al desarrollo de la ciudad? Menos. Son un grupo de levanta-manos automáticos, floreros con sueldo, y estorbos profesionales que no sólo no ayudan, estorban, y todavía quieren que les aplaudan.
La 4T en Matamoros debería tener vergüenza. Porque estos regidores no representan al pueblo, representan la decadencia del compromiso. Son la antítesis de lo que dicen defender. La bancada de Morena se ha convertido en la sala de espera del cinismo: todos sentaditos, todos mudos, todos cobrando.
«Matamoros arde… y los regidores de Morena nomás echan aire»
Un cabildo de floreros, una justicia reciclada y una ciudad que ya no cree en salvadores de utilería.
Y ya que hablamos de cinismo: hola, Mireya González.
La misma que un día es priista, otro panista, y ahora dizque morenista, pero de convicciones firmes… firmemente atornillada a la nómina, claro. Y aún así se atreve a cuestionar a los periodistas. Regidora, no se equivoque: aquí no nos asustan sus pataletas. En vez de atacar a quienes informamos, mejor explique qué ha hecho por la gente desde su asiento con calefacción. Y no venga con excusas: desde que usted brincó de partido en partido, su credibilidad cayó más rápido que los principios de su bancada.
En cambio, quien sí suena —y fuerte— es Amalia Morales Cobos, que trae aspiraciones por Movimiento Ciudadano. ¿La quieren criticar? Adelante, pero al menos está en la jugada. No como los espectros de Morena, que ni sombra hacen. Y sí, Roberto Lee podría cederle el paso y apuntarse para diputado federal. Movimiento inteligente. Aquí no hay improvisación, hay estrategia. Trabajo mata grilla, y en eso, MC les está dando clases gratis.
Y para quienes se burlaban del PRI… cuidado. Bruno Díaz anda por Matamoros y aunque digan que el tricolor está muerto, el cadáver huele a pacto, no a tumba. Que el PT haya sobrevivido tres trienios a base de familia y franquicia no es casualidad. Así que no den por muerto al PRI. Si algo sabe ese partido, es vivir de sus últimas palabras.
Matamoros está cansado de simuladores, de regidores figurines, de representantes que solo ven por ellos. Y el país entero sigue esperando que casos como ABC no se usen más como estandarte político, sino como una lección brutal de lo que no se debe repetir.
Porque si la justicia llega tarde, los regidores sobran, y los políticos son reciclables, entonces el pastel del poder no es para el pueblo… es para el que mejor finge que le importa.
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