Opinión pública

Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- En el sexenio cabecista, con acentuación en
el periodo de pandemia (Covid 19), se hizo muy “famoso” un personaje
llamado Martín de Jesús Flores Rivera.
Siguió “bateando” fuerte en el trienio del catarrín Xicoténcatl González
Uresti, en mala hora alcalde de la capital.
Su nombre vuelve hoy a medios y redes en relación a un caso de
corrupción en la secretaría de Salud, sobre un presunto contrato no
cumplido por la cifra de 300 millones de pesillos para surtir equipo médico.
El tema cobró fuerza cuando, la semana anterior, la Contralora Angélica
Pedraza, dijo que el expediente está en investigación y se dio parte a la
Fiscalía Anticorrupción, relacionando a la jefa de Compras, Dora Oralia
Valdez Zozaya.
Los órganos de fiscalización del gobierno de Morena actuaron pronto,
ubicaron la falta e hicieron la denuncia. Lo que sigue es castigo o devolver
la lana ¿sí?. El gobierno de Américo Villarreal mantiene una guerra
permanente en contra de la corrupción.
¿Qué fue lo que pasó? Los datos preliminares dicen que Valdez Zozaya
asignó en forma directa un contrato a la empresa Equipo de Laboratorio,
Curación y Medicamento Maniflosa, con domicilio por la avenida Juárez de
esta capital.
Flores Rivera aparece como representante legal de Maniflosa ¿quién es
él?.
Nada menos que el yerno de José Alfredo Peña Rodríguez, ex Tesorero
Municipal de Victoria, otro de los catarrines que acompañó a Xico en la
aventura de dirigir los destinos de los capitalinos.
En ese trienio se sirvieron çon la cuchara grande. Las denuncias
periodísticas dieron pelos y señales del saqueo y conflicto de intereses,
pero la Contraloría se hizo sorda.
La sospecha es que hay un mar de corrupción, y que desde entonces
Maniflosa no entregaba productos y artículos que cobraba. El cabecismo los
protegió.
Hoy se hicieron las denuncias oportunamente y la maquinaria
anticorrupción avanza guillotina en mano.
Para el último trimestre del 2019, al “yerno de oro” le fue adjudicado un
contrato por hasta 18 millones de pesos para surtir medicamentos para la
burocracia municipal ¿quién asegura que los entregó?. Pareciera el modus
operandi.
Igual delito: El suegro Peña fue uno de los que calificaron y aprobaron la
asignación del contrato, cuando debió excusarse.

El yerno creó la empresa Comercializadora Maniflosa el 26 de agosto del
2009, ante la fe del notario Rafael Torres Hinojosa, distrito judicial Ciudad
Victoria. Dos años después le cambió a Equipo de Laboratorio, Curación y
Medicamento.
Llegó la gran cosecha y, con esos antecedentes, la idea es que solo
cobró -confabulado con funcionarios- y los bienes adquiridos jamás
beneficiaron a los tamaulipecos ¿quién lo garantiza?. La investigación
debería ampliarse allá.
El 17 de junio del 2017, el entonces jefe de Administración, Jesús “El
Arabe” Nader, secretario de Administración, le otorgó contrato por 600 mil
pesos por la compra de 4,100 pruebas antidoping que la General de
Gobierno utilizaría para checar si los choferes de transporte público eran
drogadictos ¿las surtió?. Hay dudas.
En abril 30 del 2019 la entonces directora del DIF, Omeheira López
Reyna, le concedió al yernito contrato por un millón 600 mil pesillos por la
compra de “medicamentos para la asistencia social” ¿realmente llegaron?.
Otro secretario de Administración, Jesús Alberto Salazar, le dio
directamente, sin concurso, la compra a Maniflosa de un millón 600 mil
guantes hospitalarios por la suma de 9.2. millones. El compromiso se firmó
el uno de abril del 2010 ¿llegaron a los nosocomios?.
Un contrato más fue por la compra de poco más de cien mil guantes,
que ahora se sospecha tampoco “llegaron”, lo cual debería investigar la
Contraloría o Anticorrupción y Buen Gobierno.
Por la época, los panistas decretaron que por la “emergencia” de la
pandemia se valía comprar todo sin licitar. Firmaron documentos Gloria
Molina Gamboa, la chiapaneca secretaria, nombrada por Cabeza el 20 de
abril de 2017; Víctor Manuel Girón Dimas, apoderado legal de Servicios de
Salud de Tamaulipas y el Subsecretario de Administración, Enrique Nader
Nemer, pariente del árabe Jesús Antonio.
En las investigaciones de corrupción que realiza el gobierno
americanista, poco se ha hablado de ellos a pesar de ser ahí donde se
detectaron los casos más sonados, hablando monetariamente.,
Hay mucha tela de donde cortar. Está el caso de la Arrendadora Ariana,
representada por Alfonso Pérez López, a quien el panismo concedió 12.6
millones por suministro de equipo, mobiliario e instrumental médico
¿llegaron a los hospitales?.
Un dato más: El yerno de oro es hermano de aquel también famoso
“Pepe” Flores Rivera, ex secretario privado del Gobernador Egidio Torre
Cantú, enviado por él a la Coepris donde se hizo millonario, tanto que llegó
a tener aviones particulares y compró decenas de propiedades.
Cuando en 2017 los cabecistas amagaron con investigarlo huyó del
estado, tanto que a ocho años y medio no se sabe mucho de él.
Por ahí va la madeja de la corrupción. Viene de años, no tanto de ahora.