Análisis político:

Por Agustin Peña Cruz
El panorama político en Altamira empieza a aclararse; todo parece indicar que son
cuatro los posibles candidatos que habrán de enfrentar una contienda electoral
entre recuerdos de más de 3 décadas, un nuevo aprendiz y viejos adversarios
políticos. Ahora, los cuatro tienen las mismas posibilidades en aspectos
financieros y relaciones públicas, pero solo uno es el que podría teñir su liderazgo
político ante la sociedad de Altamira este 2 de junio, en el proceso electoral
próximo a iniciar el 15 de abril, pues de ser eso posible, se estaría reafirmando el
trabajo de la administración que ha hecho de las finanzas públicas el actual
alcalde.
Sin duda, es Armando Martínez Manríquez quien, el día de ayer, el Partido del
Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ha respaldado sus aspiraciones
para su reelección. No obstante, no pierde los ánimos ni sus deseos de contender
el ex alcalde de Altamira, administración 2005-2007, Juvenal Hernández Llanos, y
podría estar en la boleta electoral a través del Partido de la Revolución
Democrática (PRD), lo cual se sabía desde hace mucho tiempo que la mamá del
actual delegado estatal del PRD, en una charla de café en un conocido
restaurante, revelaría que ese sería el plan B de Juvenal Hernández Llanos,
puesto que ya había platicado en caso de cerrarse las puertas por el partido
Morena, como fue lo que sucedió.
Mientras que este lunes, el 2 veces alcalde Juan Genaro de la Portilla Narváez,
revelaría que Hernández Llanos lo considera como un hermano y esperaría su
decisión para poder entrar al terreno de juego político, lo cual se estaría dando a
conocer en los próximos días si pudiera haber una alianza entre el PRD y el
Partido Movimiento Ciudadano (MC), puesto que cuando hizo ese
pronunciamiento De la Portilla Narváez, fue al lado derecho de su hijo Esteban De
la Portilla Flores, quien figura como delegado de dicho partido en Altamira,
Tamaulipas.
No obstante, otra figura que resalta y a la cual De la Portilla Narváez considera
como hijo adoptivo es Miguel Gómez Orta, quien habrá de contender también por
la alcaldía municipal el Partido Acción Nacional (PAN). De ser posible estos
escenarios, se estarían enfrentando como vulgarmente se dice, 3 viejos lobos de
mar y un discípulo, tanto de Armando Martínez, Genaro De la Portilla, Juvenal
Hernández y su pariente político, es nada más y nada menos que Miguel Gómez.

Este escenario pinta ser algo complejo, complicado y digno de análisis, ya que si
bien estas piezas en el ajedrez político dejan claro y visible un solo objetivo:
arrebatar el poder a Armando Martínez Manríquez, quien lo estuvo disputando por
casi 3 décadas y que hoy, en este 2024, se ve cristalizado nuevamente su sueño a
través de una reelección.
Estaremos atentos a cómo se ajustan y cómo se acomodan estas piezas en el
tablero político y quiénes son los que avanzan primero, aunque recordemos que,
en el ajedrez, los peones dan el primer paso y para hacer jaque mate se tienen
que mover los alfiles y el caballo para tomar el “Castillo”, es decir, la presidencia
municipal de Altamira.
Nos vemos en la próxima entrega mi correo electrónico es:
[email protected]