La Comuna

José Ángel Solorio Martínez

MORENA-TAM, tiene un grande padecimiento –parasitosis aguda– que, de no sanar, pondrá en riesgo un triunfo contundente y sonoro de la candidata presidencial, de la IV T, Claudia Sheinbaum Pardo. Esa enfermedad, tiene varias manifestaciones que están la vista, pero nadie quiere ver –unos debido a su vista corta; otros porque desconocen la realidad política, y otros, porque no fueron beneficiados en las candidaturas–.
La más grande expresión de aquella dolencia, son los candidatos al Senado de la república, Olga Sosa –tampiqueña– y el texano-mexicano, José Ramón Gómez Leal.
Desde hace semanas, fueron ungidos como precandidatos.
Y no se ven aplicándose para cumplir sus tareas.
Cierto: la ley es bastante restrictiva en este periodo electoral. Se debe hacer jornadas de proselitismo al interior del partido y a la sombra. Es decir: nada de movilizaciones masivas ni propaganda expresa, ni en medios ni en redes sociales.
¿Qué significa que estén paralizados los abanderados para el Senado de MORENA?
Principalmente: están, –los dos– esperanzados a que la candidata Sheinbaum Pardo, los remolque y los lleve a la orilla.
De otra forma: desean convertirse en senadores, sin el menor gasto y con el menor esfuerzo.
¿Qué implicaciones políticas podría acarrear la forma de ver las dinámicas políticas de esos pícaros morenistas?
1.- Caerá la votación para la aspirante presidencial #esClaudia. Deberían tenerlo claro la –hasta hoy, pasiva– fórmula: son candidatos para apuntalar en la región a Sheinbaum Pardo. Más claro: para sumar votos a la ex jefa de la CDMX; no para restarle sufragios, y menos para tirarse a la hamaca y esperar que el arrastre de la doctora, los lleve a buen fin.
2.- Su escasa presencia en la totalidad de la geografía tamaulipeca –Sosa se circunscribe a Tampico y JR, está encajonado en Reynosa– los pone en una situación incómoda ante el próximo banderazo de inicio de la temporada comicial. En síntesis: son muy pocos candidatos, para tanto partido.
3.- Esos aspirantes de tan bajo perfil, pondrán a sudar frío a los Tachos. Como se sabe, la Tacha Contreras, es la experta electoral de la IV T tamaulipeca; y como tal, maneja hasta la última hoja de la estructura electoral en la entidad.
Tanto Olga como JR, necesariamente tendrán que acudir a los servicios de doña Tacha, para cubrir, capacitar y movilizar a los más de cinco mil representantes de casilla que moverán y sancionarán la elección de este 2024.
¿Han hecho algo para avanzar en esa gigantesca tarea, los principales interesados –Sosa y Gómez Leal– de ese fundamental trabajo?
E ahí el problema: hicieron intersección, dos eventos de ineficacia, la impericia –documentadamente probada– de la pandilla de los Atanasios y la ganga del guachicol: Olga Sosa y José Ramón Gómez Leal, quienes viven en sus mundos de frivolidad y de superficialidad.
4.- No se requiere meterle mucha materia gris: el gran perdedor de ese acomodo de vanidades y de mezquindades tamaulipecas, es el segundo piso de la IV T, que promueve Claudia por todo el país.
¿Y el delegado de MORENA?
¿Y los duchos operadores de la candidata presidencial en la región?
Nadie da razón de ellos.
Muy probablemente, todo ello se deriva de la poca atención política del CEN morenista a la comarca; porque la atención económica, sigue prevaleciendo. Un precandidato a la alcaldía de Madero, me contó en confianza:
“Citlalli, me pidió apoyo; le dije: cómo no, van cinco millones. Ella me dijo: ¿De verdes?”
Como dicen en la zona rural de Río Bravo:
-Dios guarde la hora.