Opinión pública

Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- A su paso por la General de Gobierno apantalló
con sus “audaces” estrategias de “ingeniería electoral” que, al final de la tarde,
resultaron una farsa que lo arrastró a él mismo a la derrota.
Su fama de “operador” se derrumbó cuando, en la elección de 2022 estuvo a
punto de perder la joya de la corona, Xicoténcatl, la gran capital de su imperio.
En los hechos la estrategia de César Verástegui Ostos fueron vulgares
amenazas, dádivas y presiones sobre los líderes de la zona cañera.
Ser dueño de vidas y almas en seis municipios, no impidió que los
ciudadanos ejercieran libremente el sufragio, a pesar de la criminal represión
ejercida desde el gobierno y los capataces del cacicazgo.
En la capital del virreinato la competencia fue tan reñida que, la sucesora en
el trono, la cuñada consentida, quedó a casi mil votos de diferencia con los
oponentes, siete mil a seis mil sufragios.
La “enaceitada” y amenazas no fueron suficientes para un triunfo holgado. El
principio del fin ha comenzado. Con seguridad entregarán la plaza en 2024 y, el
conducto para la rendición incondicional será el cachorro Verástegui Aranda. A
tierna edad lo quiere aventar al fracaso.
Tal derrota se cocina en el cuarto de guerra de Marcos Zuviri Rivera,
aguerrido secretario General de Morena Tamaulipas. Si alguien sabe del
descontento hacia los métodos violentos del cacique, es él.
El Mante, la segunda capital, ha puesto también las cruces por delante. La
ciudadanía quiere sacudirse el lastre pernicioso de los Verástegui.
La última encuesta de Massive Caller, publicada el 27 de agosto, muestra la
realidad en la cañera: El 51.0 por ciento tiene la intención de votar por Morena y
aliados, un 24.2 por el PAN y 5.7 por el PRI.
Según el dato, los dos últimos partidos, ni sumados, le harán cosquillas a los
guindas. El PRD es un insepulto cadáver de tres días.
Personalmente el cacique recorre lo que hasta hoy son sus minados
dominios. Toma decisiones sobre las rodillas. Como si fueran gripa, quiere
deshacerse de los rencores generados entre el respetable, acumulados por él y
su familia a lo largo de 24 años en el poder.
Para dar la pelea tiene un “gallito”, Noé Ramos Ferrétiz, quien lo único que
ha construido como alcalde -busca la reelección- son odios ciudadanos.
Si no le pega su fórmula, Don Truko tiene un “as” bajo la manga: José Luis
“El Güero” Castellanos, ya sea por la coalición prianista o de “independiente”. Es
una de las jugadas para no desmembrar el imperio.
Los que conocen a ambos personajitos dicen que este martes, el mandadero,
cumplió la orden de “colgar” un video en que dice “quiero ser el próximo
presidente municipal”, e invita a los ciudadanos a que le den “nuevamente la

oportunidad”, como si no existiera el antecedente de la primera vez que fue
alcalde.
Enfrente, desde Morena, los liderazgos han construido una candidatura
fuerte, una dama llamada Patricia “Paty” Chío, misma que hace tres años se
quedó a nada de derrotar al trukista. Si no es ella -fogueada en dos campañas-,
ahí está un Alberto Moctezuma Castillo, ubicado en segundo lugar.
Del resto de las regiones hay poco que hablar, apenas un puñado de
ciudadanos sometidos por la violencia desde Xicoténcatl.
Nuevo Morelos tienen seis casillas fáciles de controlar y hasta de
“embarazar” con impunidad. En 2022 se llevaron carro completo.
Antiguo Morelos sigue bajo el yugo de Los Tinajero, gerentes regionales del
trukismo. Son 14 casillas en que, curiosamente, ha llegado a votar hasta el 80
por ciento del padrón.
Gómez Farías instala 17 mesas receptoras. En 2022 se dio la hazaña que el
Verde Ecologista ganó una de ellas.
Solo como dato, en la elección del 2021, la primera cuñada de la “capital”
trukera perdió en nueve casillas.
Pues bien, Don Truko comenzó a jugarse el último recurso según sus
enseñanzas de “ingeniería” mapachil. Emprendió una campaña a través de sus
alcaldes y medios de comunicación en contra del gobierno estatal morenista.
Soñaron que, tejiendo novelas de ese tipo, bajarán la intención de voto a
favor del partido de Américo y Andrés Manuel. Obedecen instrucciones desde
Xicoténcatl. Fieles a sus amos, se divorciaron de la capital Victoria.
Entre la voz popular, allá donde se maneja el voto duro, hay la seguridad
que, para el tres de junio del 2024, ya no todos los caminos de la zona cañera
conducirán a Xicoténcatl, o simplemente habrán desaparecido. La negra historia
de un cuarto de siglo habrá terminado.
Y hablando de precandidatos y suspirantes de Morena, no causó sorpresa
sino que confirmó que, en Matamoros, el diputado Alberto Granados Fávila es
“puntero” para la sucesión de Mario López Hernández, La Borrega, en la
alcaldía.
La misma empresa Massive Caller lo coloca con el 24.3 por ciento de
preferencias ciudadanas, por sobre Adriana Lozano Rodríguez, que alcanza el
20.3 y Carlos Balleteros 8.1. Más abajo Víctor García Fuentes y el diputado
Isidro Vargas Fernández.
Hablando de diputados, la Permanente del Congreso del Estado aprobó este
martes punto de acuerdo en que solicita al Poder Ejecutivo información sobre la
“eficiencia” del Fiscal Anticorrupción Raúl Ramírez. En comparecencia les dijo
que, de más de 400 expedientes, judicializó 25.
Hoy tiene en sus manos alrededor de 60 denuncias que implican a más de
un centenar de funcionarios que gozan de impunidad. Empiezan a tenderle la
“camita”. La ineficiencia es una de las vías para regresarlo a Nuevo León.