Por; Jose Luis Avila.
Cd. Victoria, Tamps; Autoridades del sector salud alertan ante los cambios climáticos y la temporada invernal se agudizan las enfermedades respiratorias, y al no cuidarse se pueden registrar más víctimas incluso provocar que la cifra de muertos por este padecimiento aumente.
Sobre todo por la enfermedad de la Influenza que a consecuencia de este mal en diferentes Estados del país, incluido Tamaulipas, ya se han registrado fallecimientos, por ello y de acuerdo a los protocolos de salud para emitir un mayor cuidado ante esta enfermedad, “porque recordemos que este virus es transmisible”.
Por ello la necesidad de cumplir con los criterios de salud aunque se rechaza emitir una alerta, ya que el número de enfermos no es considerable ni la cantidad de personas muertas, lo que queda es que sean los propios ciudadanos los que se cuiden.
Esa advertencia es crucial dado que las bajas temperaturas continuarán, y se prevé que hasta mayo seguirán los fríos en Tamaulipas.
Además los cambios de temperatura provocan desbalances en la salud, lo que contribuye a incrementar las posibilidades de contagio.
Asimismo insisten dichas autoridades en caso de registrar un cuadro de gripe, no se auto medique pues es mejor acudir al médico para descartar la presencia del virus, “pero no está de más mantener la vigilancia en los menores y las personas de la tercera edad, aunque las autoridades sanitarias aseguran que hay pocos casos de Influenza en niños y adolescentes”.
La insistencia en vigilar cualquier brote de gripe es que aun cuando la Secretaría de Salud afirma que no se hace necesario emitir una alerta epidemiológica, ocurre que es la propia dependencia federal la que indica que en el periodo de tres a cinco semanas el número de enfermos y muertos por esta enfermedad aumentará, lo cual podría generar un incremento de hasta el 20 por ciento en estas estadísticas comparativamente con lo que sucedió en años anteriores.
Por eso es necesario cuidarse a sí mismo y a la familia, porque el antiviral contra la Influenza actúa más eficientemente en las primeras 48 horas de su detección.
