Col. Candelero…

Por: Abraham Mohamed

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Qué difícil se me hace ordenar mis ideas para comentar con coherencia lo que constitucionalmente es el Primer Informe de Gobierno del Presidente López Obrador pero que él decidió presentarlo como su Tercer Informe, lo cual según el vocero, Jesús Ramírez, fue “porque ya rindió cuentas al pueblo en dos eventos anteriores siendo la primera cuando llegó a los 100 días en el poder y la segunda el 1 de julio al cumplirse un año de su elección”.

Pero para muchos, el Presidente logró con ese mañoso detalle su propósito de armar la alharaca y desviar la atención sobre “los datos que tiene sobre sus planes y proyectos” haciendo que se diluyan las críticas y especulaciones que de todo tipo se desataron conforme avanzaba en su mensaje dado desde Palacio Nacional ante una rala asistencia que no llegó a 500 personas.    

También debo comentar que el texto del Primer Informe constitucional del Presidente López Obrador se encargó de entregarlo en tiempo y forma, en la Cámara de Diputados para su glosa, la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.

En este Tercer Informe palabreado, el señor Presidente, una vez más insistió en que “vamos muy bien y que pronto estaremos mejor”.

Los datos y cifras que nos dio, son para llegar a sentirnos en jauja, pero envueltos en la nube de la fantasía.

Nos volvió a machacar que los ahorros de la “austeridad republicana” que decretó, suman 145 mil millones de pesos y que eso servirá para impulsar la Cuarta Transformación del país. Ah, pero no nos dice, los grandes recortes presupuestales hechos en todas las dependencias que han ocasionado graves problemas en todas ellas pues ya no cuentan ni con lo indispensable para cumplir con su servicio y por falta de personal que fue despedido.

“Y sin presumir” nos dijo el señor Presidente que según el IMSS se han registrado 300 mil nuevos empleos muy bien pagados”, pero se abstuvo de informarnos cuántos millones se han quedado sin trabajo, tanto en el gobierno como en el sector privado por el cierre de empresas y negocios que han quebrado por la terrible crisis económica y de seguridad que padecemos.

Y así “sin presumir” también repitió que canceló la condonación de impuestos para los grandes empresarios; que bajó los salarios de los funcionarios y les quitó lujos; que acabó con las pensiones vitalicias a los ex Presidentes y que se recuperaron 50 mil millones de pesos al abatirse en 94% el huachicoleo, lo cual se le reconoce. 

A su muy peculiar estilo, aunque dijo “sin presumir” que ya separó al Poder Político del Poder Económico, reflejó su ideología acomodaticia al enfatizar que su propuesta económica es “honestidad y austeridad en forma de vida y gobierno” y que para él, primero son los pobres, pero es evidente que mantiene extendida la mano sobre la billetiza de los magnates que están de acuerdo en apoyarlo en la construcción de las icónicas obras del Tren Maya, de la nueva refinería de Dos Bocas, del nuevo aeropuerto de Santa Lucia y del Corredor Transítsmico invirtiendo para impulsar el desarrollo del Sur Sureste del país pues ellos son hombres de negocios y su dinero es para hacer más dinero.

“Sin presumir” el Presidente López Obrador nos dijo también que por primera vez en 14 años, “gracias las nuevas medidas de operar en Pemex, en este año no bajó la producción de petróleo manteniéndose en 1 millón 671 barriles diarios la cual subirá con la participación de empresas nacionales y extranjeras en los trabajos de exploración y extracción del crudo.

Sobre seguridad que es un tema muy escabroso, el Presidente fue muy cauto. Solo habló de que están en funciones 58 mil elementos de la Guardia Nacional y que en total serán 150 mil los que bien capacitados se encargarán de proteger a la gente buena.

De las matanzas registradas en varios Estados y de las agresiones hacia los militares, nada dijo.

También habló “sin presumir” de las “Tandas para el Bienestar”, créditos a la palabra para quienes se ganan la vida en la economía informal; el apoyo a los campesinos; la siembra de un millón de árboles maderables; advirtió que irán a prisión sin fianza quienes cometan fraudes electorales o financien a partidos con recursos públicos; dijo que nuestras exportaciones subieron en Julio a 39 mil millones de dólares y feliz envió su aplauso a los migrantes mexicanos radicados en Estados Unidos porque en seis meses enviaron remesas por $16 mil 585 millones de dólares, convirtiéndose en la fuente más importante de ingresos del país.

Y soltó más y más cifras y datos de esos que les encantan a sus Amlovers. Los conoce muy bien, les dice lo que les gusta escuchar y los embelesa con  palabras llenas de esperanza para sacarlos de la pobreza.

Por eso llegó a su Primer, perdón, llegó a su Tercer Informe de Gobierno, con 69% de aprobación.

ADENDUM: Ruego porque los proyectos del señor Presidente se conviertan en realidad para bien de todos.

Por ahora reconozco que es genial en el manejo de cierto tipo de personas que suman más de 30 millones y hasta ha hecho que los periodistas aplaudan en “las mañaneras”.

El es maestro del blablaísmo y sus fantasías son convincentes, maravillosas y contagiantes. Por eso llegó a la Presidencia.

Su fantasía o sueño de ser Presidente la convirtió en realidad y eso multiplicó a sus admiradores que sí creen que “vamos bien y que pronto estaremos mejor”.

¡Ojalá….!