¿Quién demonios estará asesorando a RICARDO ANAYA CORTES?, quien sabe, pero su estrategia de darse baños de pueblo nadamás no le está funcionando.  

Al contrario, en lugar de sumar le está restando credibilidad a su persona y no logra hacer empatía con el respetable pues a cada publicación de los lugares donde aparece le llueven los comentarios adversos, y es que a RIKI RIQUIN CANALLIN, como le dijera, Ya Saben Quién, nada mas no se le da el ser auténtico cuando de tocar cosas sensibles para el pueblo se trata, por eso, cuando trata de hacer clic con la gente de a pie lo rechazan, bueno, ni siquiera con la mayoría de los de su partido ha podido empatar.  

Otra situación, ¿quién lo patrocina?, porque la verdad se duda que ande gastando dinero de su bolsa, tampoco tiene fama de buen samaritano y de esa forma ande recorriendo la República mexicana, pagando hoteles, alimentación y transporte, además es obvio que le acompaña un grupo de gente, por lo menos camarógrafo, fotógrafo, secretario, guionista y chofer, que tampoco se cree que anden como dijera la abuela, de sígamela maestro, es decir de gratis.  

Reza el refranero popular que cae más pronto un hablador que un cojo, y si, pues RICARDO ANAYA está haciendo justo lo que tanto reprochó de ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR cuando perdía la presidencia de la República y luego recorría el país y en sus discursos nunca dijo quien lo financiaba.  

Lo peor es que son torpes sus comentarios sobre los usos y costumbres de los mexicanos, cuando habla de los tacos, elotes y garnachas más que dar emoción o llamar a la reflexión causa decepción y risa.  

Con respecto a los tacos, tortas y garnachas que trae de novedad, pero que la mayoría de la gente es para lo único que le alcanza y a veces ni para eso, debería darle vergüenza mostrarse comiendo cuando hay un montón de gente que no tiene para llevar alimento a su hogar.  

Y quizá diga ANAYA que todo es por culpa de la actual administración, que en parte tiene razón pues con los de la 4T en lugar de avanzar se retrocede en este país, hay más pobres y la clase media está por desaparecer, pero que no se le olvide a RICARDO  que también es culpable de lo que hoy padece México, porque ni modo que diga que FELIPE CALDERON y VICENTE FOX más el montón de malos gobiernos emanados del PRI le eran desconocidos, al contrario, formó parte de ellos, pues  este México lindo y querido ha sufrido y sufre la indiferencia oficial y los políticos como el mismo ANAYA CORTES solo aparecen “para defender al pueblo” cuando se está en procesos electorales.   

Pero bueno, eso es siempre, sean del color que sean es lo mismo, razón por la que el 6 de junio los mexicanos debemos, ahora sí y de una vez por todas, analizar bien nuestro voto, no votar con rencores o pasiones sino con la razón para que este país comience a tener los políticos que merece, los que se necesitan, quienes le cumplan, que vean por el interés del pueblo más que sus intereses de grupo, partido o personales.  

Regresando con el patético caso de RICARDO ANAYA, su infructuosa gira y comentarios desafortunados, su última gracia, porque es para lo que le alcanza, que la gente se ría de él o que sus comentarios sirvan para que el ingenio del mexicano de rienda suelta a su talento con chistes o memes, eso es todo lo que le queda al antes muchacho maravilla.  

Por ejemplo, la del compadre que se gasta 2000 pesos semanales en caguamas en lugar de utilizarlos en la manutención de su familia, que a decir verdad, si el mensaje hubiera estado mejor estructurado quizá una reacción positiva tendría, pero solo sirvió para memes y chistes.  

“Pues ahí tienes que el RICARDO ANAYA se metió con lo más sagrado que tenemos”, dice un compadre, y el otro le pregunta, “No me diga que el inútil se metió con nuestras familias o mamacitas”, “No, con nuestras caguamas”, responde, luego las carcajadas.  

Es un hecho que RICARDO ignora qué, por ejemplo, para un albañil que tiene pesadas jornadas de trabajo comprarse unas caguamas para disfrutarlas con sus compadres o amigos el fin de semana no es ningún pecado, además por lo general primero atiende las necesidades de su hogar. El comprar una o dos caguamas no los hace irresponsables ni alcohólicos.  

En fin, la situación es que RICARDO ANAYA CORTES, continúa haciendo el ridículo en su gira de baño de pueblo, la gente no le ve autentico, sus dichos son más de risa que de reflexión, lo malo es que en lugar de sumarle a las causas de su partido le resta. Como dijo el vecino, peor cuando se mete con lo más sagrado.