La fecha de los destapes morenistas a cargos de elección popular, sigue  posponiéndose en Tamaulipas. 

  Ante semejante estrategia  que parece avanzar a paso de quelonio empachado, nos dimos a la tarea de investigar por  nuestra cuenta, quien o quienes son los artífices de  este premeditado tortuguismo, que a esas alturas  ya ha provocado entre los aspirantes severos casos de gastritis, tics nerviosos, insomnio, inapetencia y toda una gama de disfunciones  inconfesables. 

 Ya los detectamos. Y les tenemos sus nombres. 

 Las fechas favoritas de estos torturadores color guinda, caen siempre en viernes. Y  de ahí  dan un salto semanal, provocando en las filas de su partido, una creciente demanda por Tredas, Lomotiles y hasta las famosas infusiones con hojas de guayabo. La cosa no es para menos, y peor aun si  algunos de los interesados ya le metieron alguna lana. 

  El desasosiego a  nivel interno, es terrible, por no decir que devastador. Algunos candidatos y candidatas nos confiesan, que ya ni las risas de los nietos o  los viajes semanales al rancho, los consuelan. El tema del COVID  ha pasado a un segundo o tercer término. Y  lamentablemente para  el virus de  la angustia política, no hay vacunas que valgan.  

 Cuadros de diarrea, fiebre, temblores musculares y hasta pesadillas, lo mantienen al borde del desquiciamiento.  Pero…¿Quiénes son los responsables de postrar a las candidatas y candidatos morenistas, en el sofá de las terapias  psicológicas? 

 Pues bien, como les decíamos en un inicio, nos dimos a la tarea de indagar. Y todas nuestras pesquisas conducen hacia dos personajes, con acreditada  fama de agitadores y de inventores de historias que pretenden atemorizar, sembrando  la confusión y el miedo.  

 En un inicio creímos que se trataba de gente afín al «Señor de las Ligas», el célebre  Bejarano, pero no fue así. Al parecer trabajan por su cuenta, y no responden ni a los puristas, ni a los Marcelos, ni a los Berthos, tampoco a los Monreales. 

 Dado el clima de misterio y de exacerbado suspenso, ya descubrimos que los culpables de lo que está ocurriendo en el novelesco  proceso interno del morenismo tamaulipeco, son dos expertos en la trama del asombro y los nervios de punta. 

 Uno es de cara regordeta y mirada burlona: se llama Alfred Joseph Hitchcock, un Director de cine, productor y guionista de origen británico. Se le considera el amo del thriller psicológico. Y al parecer, es uno de los principales asesores del dirigente nacional de MORENA, Mario Delgado Carrillo. 

 Alfredo Hitchcock es un pájaro de cuenta, y seguramente será llamado a declarar  por la  temible y flamígera Comisión de Honor y Justicia del CEN  de MORENA.  Fuentes  bien informadas desde la CDMX nos hacen llegar  versiones fidedignas en el sentido de que ya  se le está integrando un grueso expediente al personaje aludido. 

 Entre los presuntos cargos que se le están fincando, destaca el de una profunda perturbación psicológica, provocada a los aspirantes a alcaldías, diputaciones federales  y locales.  

Para Hitchcock, se sabe, la democracia interna en MORENA, es algo parecido a uno de sus filmes más laureados: “Crimen Perfecto”. 

 Pero existe, según las líneas de investigación, un segundo culpable  de retardar  los destapes  morenistas en nuestro estado. Su nombre? Edgar Allan Poe. 

 De acuerdo a una de sus pocas fotografías, Poe es un tipo de rostro ojeroso y mirada  de operador político, en plena negociación interna. Este sujeto Allan, carga siempre con él, a una mascota siniestra, un Cuervo parlante, que es algo así como su consejero de cabecera. Se sabe que cuando el ave emite su voz ronca y misteriosa, algo delicado está por suceder en los  procesos internos del morenismo. 

Recientemente, El Cuervo de Allan, emitió entre graznidos, una palabra que al inicio nadie comprendía. En medio de una oscura y tenebrosa noche reynosense, dijo: ¡Rikito! ¡Rikito! 

Ahora todos sabemos que  esta ave de mal agüero , juntó los nombres de Rigo y Makito. ¿Que criatura democrática nacerá de todo esto?

Habrá  consecuencias  en  la cábala de este cuervo emisario de la 4T?

 Por cierto,  que cuando le preguntan  al Cuervo de Alla Poe, sobre   la corrupción del cabecismo en Tamaulipas, contesta, con voz estentórea  de desafuero: 

—Nevermore! ,  nevermore! 

 Nunca Más!, Nunca Más!