PODER POLITICO…

Por: Ciriaco Navarrete Rodríguez.-

En Tamaulipas, el próximo año 2019, habrá elecciones legislativas y con ese propósito, las fuerzas políticas ya iniciaron sus correspondientes preparativos, lo cuales consisten en la reestructuración de los Comités Estatales y también los Municipales, de cada uno de los partidos políticos.

Y es posible que cada una de esas fuerzas políticas, también estén ocupadas en la planeación y programación de las diferentes estrategias políticas destinadas a convencer al electorado para que acepten, y luego voten por las propuestas electorales que les habrán de ofrecer sus respectivas candidatas y candidatos que habrán de contender por cada uno de la 21 Distritos electorales correspondientes a la geografía política de Tamaulipas.

Nadie debe confiar en los resultados de elecciones del pasado, porque si bien es cierto que hay referentes importantes que determinaron aquellos triunfos, también es verdad que la dinámica política se ha convertido en un conjunto de tareas imponderablemente cambiantes.

En las elecciones locales del año 2016, los factores determinantes del triunfo arrollador del Partido Acción Nacional (PAN), el hartazgo priista y las atrocidades de los causantes inseguridad pública, pero la psicología política ha cambiado en el presente año 2018, y ese fenómeno se debe a los efectos de la campaña triunfalista del actual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

En el primer caso fue muy satisfactorio para el electorado tamaulipeco, el aplastante triunfo electoral del actual gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca y fue entonces cuando por primera vez llegó la alternancia partidista lograda por el Partido Acción Nacional (PAN), instituto político que ganó la mayoría la mayoría de las alcaldías y también las diputaciones locales, logrando así un infranqueable empoderamiento político y gubernamental. 

Pero en presente año 2018, de las nueve Diputaciones federales que estuvieron en juego, el PAN sólo ganó tres, y la Senaduría de la primera minoría,  y en cambio el partido “Movimiento de Regeneración Nacional” (MORENA), se alzó con la victoria en las 6 restantes diputaciones federales, en las dos Senadurías de mayoría relativa.

Pero el PAN avanzó en la preferencias electora les municipales, al haber ganado en 33 de los 43 Ayuntamiento que conforman la geografía política municipal de Tamaulipas, lo cual es muy significativo porque hubo “voto cruzado” debido a las indecisiones electorales de los votantes, quienes en realidad no despreciaron panismo porque en realidad fueron selectivos debido a que evidentemente fueron desconcertados por el miedo a la inseguridad pública y por la curiosidad especulativa de las propuestas presidenciales de AMLO y de los candidatos a diputados y senadores de de MORENA.

Dicho de otra manera, el panismo sigue conservando su hegemonía triunfadora, y sus líderes deben cuidar celosa e inteligentemente esa realidad, de la misma manera que los alcaldes panistas deben seguir el paso acelerado del Gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, mediante un sensible y sensato trabajo de cara a la cercanía con las familias tamaulipecas que residente en todos y cada uno de los 43 municipios de Tamaulipas.

Los integrantes de las estructuras de los tres poderes del Gobierno del Estado, igual que sus respectivos colaboradores deben trabajar profundamente comprometidos con sus respectivos encargos públicos, porque de eso dependerá siempre el aprecio y la correspondiente valoración partidista que hagan  los votantes en las elecciones futuras.

Es cierto que el gobierno de García Cabeza de Vaca ha tenido que lidiar con las conductas atroces que por uso y costumbre fueron forjadas en el pasado priista, pero también es verdad que los integrantes de sus diferentes equipos de colaboradores están obligados a perfeccionar sus acciones para evitar el deterioro de los grandes esfuerzos que ha venido encabezando en referido Jefe del Poder Ejecutivo de Tamaulipas.

Insisto en la necesidad de cuidar los modos y las respectivas formas de desarrollar de las políticas públicas necesarias para un correcto desempeño de los quehaceres púbicos, con eficiencia y eficacia, porque de eso dependerá el aprecio y la confianza popular de los electores.

Debo insistir en esa realidad, porque loa gobernantes municipales y estatales, deben esmerase en erradicar la improvisación al tomar decisiones para ejercer y desarrollar las políticas públicas al servicio de las familias tamaulipecas.

La inseguridad pública sigue siendo uno de los más grandes y graves problemas que causan mucho miedo a todas y todos los tamaulipecos, sin excepción alguna, y es un asunto que debe ser estudiado muy a fondo para que nuestros políticos y gobernantes dejen de hablar con falsas balandronadas para prometernos ideas fantasmagóricas, que jamás han dado resultados verdaderos.

Esa problemática tiene solución, pero se encuentra en la democracia verdadera, de la que crece el gobierno mexicano, porque debemos saber que ese regimenté gobierno depende del modelo agrario de la pequeña o de la mediana propiedad de la tierra, pero por desgracia la Constitución de 1017, fue redactada con base en el modelo agrario Ejidal y Comunal, pero se hizo así imitando a la legislación Bolchevique para concentrar el poder presidencial en un Dictador y propietario absoluto de todo el país, lo cual es una realidad irrefutable.

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