En promedio, cada mujer derechohabiente en vigilancia prenatal tiene siete consultas médicas, a las que se suman atenciones del personal de Nutrición, Psicología, Trabajo Social y consultas dentales.

• Los mejores resultados para un embarazo y parto seguro, con responsabilidad compartida del personal de salud, pacientes, familia y patrones.

Para brindar atención preventiva y médica oportuna durante la etapa del embarazo, a fin de proteger la vida de la madre y su bebé, el personal médico y de enfermería del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) realiza siete citas médicas, en promedio, que se complementan con una consulta o más con personal de Trabajo Social, a las que se suman atenciones del personal de Nutrición, Psicología, Trabajo Social y consultas dentales.

La Organización Mundial de la Salud establece como recomendación que la atención prenatal tenga un mínimo de ocho contactos, lo que puede reducir las muertes perinatales hasta en ocho por cada mil nacimientos.

De igual manera, la Norma Oficial Mexicana pide promover por lo menos cinco consultas durante la gestación de bajo riesgo, afirmó Rosa María Santiago Cruz, Coordinadora de Programas Médicos de la División de Atención Prenatal y Planificación Familiar del Seguro Social.

La especialista destacó que el Instituto, alineado al Plan “Bienestar para toda la vida”, tiene como misión brindarle satisfacción y tranquilidad a las mujeres durante y después el embarazo, con una serie de acciones que lleva a cabo el equipo de profesionales de la salud y que, para mejores resultados, debe involucrar también a pacientes, familiares y patrones.

Indicó que la mortalidad materna en el Instituto, a junio de 2018, se redujo a 23 por cada 100 mil nacidos vivos, lo que además representa la cifra más baja en la historia del Instituto, pues en 2016 hubo 30.2 fallecimientos por cada 100 mil nacidos vivos.

Por ello, el IMSS seguirá privilegiando la atención integral a la embarazada y a su bebé con servicios eficientes y de calidad, acciones de carácter preventivo y con la promoción de la Planificación Familiar, con pleno respeto a los derechos humanos de libre elección, subrayó la doctora Santiago Cruz.

Para fortalecer este acompañamiento, dijo, el IMSS cuenta con herramientas como la Cartilla de la Mujer Embarazada, que contiene información relevante para un mejor cuidado del embarazo, en donde se puede llevar un registro para control de las citas médicas y anotar datos importantes como peso, presión arterial, latidos fetales, datos de alarma, etcétera.

También se imparten sesiones educativas para el mejor cuidado durante la gestación y un tour obstétrico, que consiste en una visita guiada por los servicios de los hospitales con atención ginecobstétrica e información de interés en la página imss.gob.mx/maternidad

Indicó que en las primeras citas se realizan estudios para detectar VIH, sífilis o diabetes gestacional, a fin de iniciar tratamiento y evitar complicaciones durante el parto; se completa el esquema de vacunación; se brinda orientación del autocuidado durante el embarazo, alimentación saludable, actividad física y datos de alarma de padecimientos como anemia, infecciones vaginales, de vías urinarias y periodontales, así como preclamsia y eclampsia, entre otros.

En cada uno de estos puntos, explicó la doctora Santiago Cruz, es fundamental que la paciente y sus familiares cumplan con las indicaciones del personal de salud, además de estar dada de alta en el IMSS, solicitar atención médica de forma oportuna y planificar su embarazo con la consejería del personal de salud y comenzar los cuidados prenatales desde las primeras semanas. Por su parte, los empresarios tienen la obligación de inscribir en tiempo y forma a la trabajadora, o al trabajador, para que se dé el alta correspondiente, que puede ser a través de la aplicación “IMSS Digital”.

Informó que, en un año, en las unidades médicas del Instituto del régimen ordinario se registran alrededor de 400 mil nacimientos, esto es un promedio de mil 100 partos cada día, por lo que la atención de la mujer embarazada es una prioridad para el Seguro Social que requiere la suma de esfuerzos de un equipo que conforman diversos especialistas en salud, y que tiene aún mejores resultados cuando la paciente acude a sus citas programadas en tiempo y forma y al conocer los datos de alarma, acude de inmediato a recibir atención.