Por José Gregorio Aguilar
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Una de las principales razones por las cuales las mujeres víctimas de la violencia no interponen su denuncia ante las autoridades correspondientes, es por la indolencia e indiferencia con la que son tratadas cuando acuden al Ministerio Público.
“Sí se ha avanzado creo yo aunque no veamos muy rápido el resultado, se ha avanzado en el sentido de que ahora existe más la apertura que en otros años, desgraciadamente no todas las autoridades de todos los niveles están preparadas, los que ejecutan las leyes, en las instituciones, yo lo vivo en lo que participo”.
Además, si la víctima no presenta huellas visibles de la violencia o de los golpes, no les aceptan la denuncia, afirmó Claudia Isela Valdés Briseño, representante del Centro de Ayuda para la Mujer en Latinoamérica.
“Si llega una mujer violentada y no lleva golpes visibles le dicen no le puedo levantar la denuncia porque no trae golpes, regrese cuando traiga y a pesar de que la ley te obliga a levantar la denuncia porque tienes hasta cierto punto la obligación de creerle a la persona las que ejecutamos o estamos al frente de la institución todavía no tenemos esa cultura”.
Reconoció que por un lado se ha avanzado en el tema de la violencia de género pero al mismo tiempo falta mucho por hacer para mejorar la respuesta de las instituciones encargadas de la procuración de justicia.
Muchas veces es personal que no tiene ni la capacitación ni la sensibilización para proporcionar un servicio digno a las víctimas; incluso,
en lugar de apoyarlas a que continúen con el seguimiento de la denuncia, les dicen que no servirá de nada porque siempre terminan perdonando a su pareja y regresarán al hogar a repetir de nuevo ese mismo circulo de violencia conyugal.
“Es por eso que muchas mujeres que ya no hacen las denuncias o ya no acuden al MP, no confían porque lamentablemente esa es la respuesta de las autoridades, hay mujeres que en ocasiones, las mismas autoridades les dicen para que levanta la denuncia si va a egresar con él y la va a quitar, mejor no la haga”.
Sin embargo, afirmó que los servidores públicos, por ley, deben recibir y dar seguimiento a las denuncias, independientemente de que las mujeres agredidas tengan o no golpes visibles o si al final decidan o no perdonar a sus victimarios pero en la práctica eso no sucede.
“Nuestra obligación es levantar la denuncia como autoridad independientemente de lo que ella decida hacer, es nuestro trabajo y para eso nos pagan tenemos que exigirle a todos y cada uno de los funcionarios públicos eso”.