Alerta, muy alertas debemos estar en estos tiempos y no solo para cuidarnos de no contagiarnos por el virus del mal de los últimos tiempos, el COVID-19, sino también de malvivientes que pueden despojarle de lo poco o mucho que tenga en sus cuentas bancarias.
Ya me habían contado que era peligroso pagar con tarjetas en algunos establecimientos, que se habían registrado casos de clonación de los plásticos o robo de clave, pero hasta que sucede se da uno cuenta de la fragilidad de todo, de lo fácil que es que nos roben y muchas veces ni cuanta nos damos.
Va la historia, el domingo acudí a un Oxxo para comprar un queso crema philadelphia, el joven dijo no tenía feria, pague con tarjeta, 30 pesos, hasta ahí todo bien.
Pero el lunes comenzaron a retirar de la cuenta, iniciaron con dos cobros de un peso, luego dos de 350 pesos, después 600, 700 y así subió el cargo a la tarjeta, para el jueves en la mañana ya eran casi 4 mil, según las notificaciones que me aparecieron en el correo personal qué, a decir verdad, vi hasta el miércoles por la noche.
Consulte y me dijeron que no llamara a ningún número de los que aparecían porque en ocasiones es la trampa para pedir compruebes tu número de tarjeta y cuenta y es donde se dan robos.
Como continuaban los cargos cancelé la tarjeta y acudí al banco para la notificación, ahí checaron y se percataron que efectivamente se estaban haciendo retiros y pagos a nombre de la empresa ADYENMX*UBER EATS II y ADYENMX*UBER EATS III pero que tenía que esperar al día siguiente para que me aparecieran en el estado de cuenta y así hacer la aclaración.
Pedí la reposición de la tarjeta, que te cobran en 125 pesos, luego pasé al cajero para activarla y esperar al día siguiente para acudir nuevamente a la sucursal bancaria y hacer la notificación.
Cuál fue mi sorpresa, que con todo y tarjeta anterior cancelada y una nueva con numero diferente para ayer viernes en la mañana ya tenía otros dos cargos, uno de 700 y otro de 600 pesos a la misma empresa, situación que me alarmó, apenas el reloj marcó las 9 de la mañana me hice presente en el banco para ver que estaba sucediendo pues me parecía inconcebible.
Amablemente la señorita me explicó que seguramente eran cargos retenidos, que ya se habían ejecutado pero que aparecieron hasta un día después, cancelé nuevamente tarjeta, pague otra reposición y se hizo el reporte a lo cual me dijeron que investigarían y si se comprobaba que no realice esos pagos se me rembolsaría la cantidad.
Aquí la duda es ¿por qué las notificaciones no llegan a tiempo para que la gente se percate del uso de su cuenta o tarjeta?, ¿cómo le hacen para retirar o hacerte cargos bancarios con todo y tarjeta cancelada?, ¿cómo puede la ciudadanía tener confianza en tal o cual establecimiento para realizar compras con tarjeta de crédito?, ¿qué tiene que ver ADYENMX*UBER EATS II y ADYENMX*UBER EATS III o porque los cargos aparecen a su favor?
Le platico lo anterior para que cuide la seguridad de sus tarjetas, checar continuamente su correo para ver sus notificaciones porque incluso aunque se tenga la aplicación móvil no nos percatamos de las alertas de los cargos que hacen a las cuentas en la madrugada como suelen hacerla los ladrones hackers.
Mucho cuidado debemos tener pues está claro que estamos a merced de muchos vivales, como si necesitáramos de una mortificación más, hoy no solo tenemos que cuidarnos del mal del demonio, el COVID-19, sino de los malvados endemoniados que igual que el virus te atacan sin que te percates.
Es un peregrinar andar haciendo aclaración tras aclaración, pagando reposiciones de tarjetas y esperar a que proceda la investigación, mientras tanto ya te dejaron sin lo poco o mucho que se tenga en cuentas. En mi caso comprar en el OXXO un queso philadelphia, que ni queso es, según ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR, me salió muy caro.