AGENDA PÚBLICA…

Por: Salvador Leal Luna.-

Lo dado a conocer por la Subsecretaria de Educación Básica de Tamaulipas, Magdalena Moreno Ortiz, donde expresa que tienen ya un protocolo para prevenir el Covid-19 en las escuelas y con ello, regresar a clases presenciales. Para un servidor, lo considero absurdo, por muchas razones, máxime que, en la inmensa mayoría de las comunidades ejidales, como en las cabeceras de cada uno de los municipios del Estado, como Victoria, se cuenta con un padecimiento brutal que es el agua potable. 

Otras de los cientos de escuelas públicas en el Estado, actualmente están enmontadas, además, no creo que el estado; es decir la Secretaría de Salud, por medio de las Secretaría de Educación, como, también del Sindicato Nacional de los Trabajadores de Educación, mejor conocido en el bajo mundo del magisterio como SNTE, tengan la capacidad no de limpiar, sino de fumigar por el dengue, como de desinfectar las aulas de clase, los baños y las oficinas de dirección, por ejemplo. 

Creo que antes de hablar de que se tiene un protocolo y que esta abalado por el Comité Estatal para la Seguridad de Salud, me parece muy aventurado, máxime que esta pandemia sigue al alza. Como Victoria, por citar un municipio, donde tiene el primer lugar, además de otras ciudades que siguen contando con casos de Covid-19. 

Ante, ello y como autoridades estatales, deben de ser muy cuidadosas, porque regresar a clases presencias, pese a que este el semáforo verde, es de alto riesgo, debido a que se abriría todo; es decir comercios, restaurantes, tiendas y demás, luego de que la educación es quien mueve a todo mundo. Entonces, las medidas serían con altura de miras en cada una de las escuelas públicas y privadas. 

Pongo, por ejemplo, Victoria, donde no hay agua y las escuelas no la tiene, siendo un recurso, no sólo humano, sino indispensable, el cual no ha sido resulto, “no sé, si dentro de ese protocolo que esta Subsecretaria tiene contemplado lo del agua, no sólo, aquí en la capital del Estado, sino en las comunidades ejidales, como en demás municipio de Tamaulipas”. 

Otro de los factores, es ver sí la Secretaria de Salud, de Educación y este mentado SNTE se comprometen a llevar a las escuelas públicas, los productos como cloro, pinol, gel antibacterial y caretas y por su puesto la mentada agua, que son insumos que se habrán de necesitar y que serán ya una prioridad en el regreso a clases presenciales en Tamaulipas. 

Para un servidor, además de aventurado, como absurdo es tener un protocolo, donde espero que esto que señalo lo tenga, Debido a que esta pandemia, reflejo las condiciones, no sólo económicas del Estado, sino que muchos padres y madres, perdieron sus empleos, lo que ha ocasionado una pérdida del poder adquisitivo grave. Y no quieran (las autoridades educativas, como del SNTE) que sean los padres quienes tengan que pagar todo, como ha sido costumbre, no solo aquí en Tamaulipas, sino en todo el país. 

Considero que este protocolo, sea dado a conocer a la opinión pública, donde participen los padres y los maestros, quienes son al final de cuentas los que sufrirán con el regreso a clases presenciales en su momento y no sea un estudio de escritorio. Porque al final de cuentas nos llevamos un “chasco”. 

Aquí, involucro a la comisión de Educación y de Salud del Congreso de Tamaulipas, para que participen en ese mentado protocolo, máxime que el ex Secretario Educación en el Estado, Héctor Escobar Salazar, quien anda con todo en Matamoros y quien preside la comisión de Educación, le entre al toro, al igual que, Juan Enrique Liceaga Pineda, de la comisión de Salud, tengan injerencia en estos menesteres. 

A mi juicio y antes de tener un protocolo para clases presenciales, deben de tomarse otras medidas como las que he señalado, máxime que muchas escuelas, como los propios maestros e intendentes, están desprotegidos en el interior de los centros educativos, además no cuentan con las herramientas, creo yo para enfrentar una pandemia, con clases presenciales; repito, pese a que se esté en semáforo verde.  

Asimismo, otro punto, es ver si dentro de este protocolo de que habla la funcionaria, esta lo de la sana distancia, tanto en el interior de las aulas, como en los descansos. Porque hay escuelas públicas con salones con más de 45 alumnos, más el maestro, donde muchas de las veces ni caminar se puede, debido a lo chico de las aulas. 

En sí, hay muchas cosas por verse, por eso, digo que este protocolo debe ser público, porque lo considero absurdo, sino se conoce a plenitud. 

Por hoy es todo. 

HASTA LA PRÓXIMA. 

Correo Electrónico. 

[email protected]