ORBE…

Por: Ma. Teresa Medina Marroquín.-

El contexto político, económico y social se volvió todo un drama hasta para los que ostentan el poder que, representados por sus partidos políticos, habrán de enfrentarse en 2021 en una lucha democrática vista casi como una guerra.

Las opiniones de lo que viene, al menos para Tamaulipas, apuntan que el PAN en el poder estatal buscará volver a controlar al Congreso del Estado con una mayoría (22 curules) que le permita al gobernador Francisco García Cabeza de Vaca continuar el resto de su mandato sin altibajos ni grandes obstáculos.

Evidentemente las 43 alcaldías tampoco son desdeñables si se considera que actualmente el blanquiazul tiene en su poder municipios tan importantes como Nuevo Laredo, Reynosa, Río Bravo, Victoria, San Fernando, Altamira, Mante y Tampico que concentran el 65 por ciento de la población de la entidad.

Para Morena, el instituto político que encabeza en forma interina y traumática Alfonso Ramírez Cuéllar, las cosas tampoco pintan fácil desde que Mefistófeles puso a pelear (casi a muerte) a todas las tribus de ese partido.

…Y donde el eventual y cardíaco triunfo de Mario Delgado, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara Baja (Jucopo), podría verse desfigurado con la participación del dinosaurio Porfirio Muñoz Ledo, de quien se dice no necesita ningún espectacular para promocionarse pues el espectacular es él.

Así de ese tamaño está el divisionismo al interior de Morena y el desafío al “dedazo” del presidente Andrés Manuel López Obrador, que incluyen la investigación de 400 millones de pesos “desaparecidos” por la anterior dirigente, Yeidckol Polevnsky.

Apoyado Mario Delgado por el diputado federal Erasmo González para ganarse las simpatías de los tamaulipecos, la supuesta percepción de que Morena “arrasará” en las elecciones no parece tener mucha conexión con la realidad.

Es decir, ni el hipotético triunfo del presidente de la Jucopo ni la propia estructura de Morena en Tamaulipas alcanzarían para gran cosa, mucho menos para que le pudieran disputar la mayoría en el Congreso Local y las principales alcaldías al PAN.

NI CON LA RENOVADA DICTADURA PERFECTA

No olvidemos que las pugnas internas en Morena, tanto a nivel nacional como en Tamaulipas, están literalmente destruyendo la estructura partidista de este movimiento que llevó a la Presidencia de la República a López Obrador.

Y a pesar de que se diga que Morena es en los hechos el nuevo PRI, con su aplanadora y parafernalia que están redefiniendo una renovada dictadura perfecta, lo único cierto es que sobresalen notorias diferencias, pues mientras en el partido tricolor nadie enfrentaba al entonces inquilino de Los Pinos, ahora no faltan los líderes cuyas convicciones les permiten contradecir al huésped de Palacio Nacional.

Lo que significa que por un lado hay sectores democráticos que no se le hincan al tabasqueño, lo que habla bien de ese partido.

Sin embargo, las discordias, la fragmentación, las acusaciones de corrupción y la cerrazón de un partido que no tiene apertura a la población se han convertido en una enfermedad grave, quizá hasta una metástasis cancerígena que, sin decirlo de esa forma, ha llevado al propio AMLO a dejar abierta la posibilidad de fundar una nueva organización política.

Semejante gravedad sólo podría dejarle una opción a los líderes morenistas, esto es, que peleen solamente por las nueve diputaciones federales en vista de que en término locales sus capacidades y coberturas no dan para tanto.

Bien decía José Saramago, Nobel de Literatura, que “el poder lo contamina todo, es tóxico”. Y a Morena le ocurrió eso, que la pureza de sus principios no la pudo mantener estando cerca del poder.

Punto y aparte al presidente AMLO poco le debe estar importando Tamaulipas, excepto conservar la mayoría en la Cámara de Diputados.

LOS RECLAMOS DE JUSTICIA SOCIAL

Finalmente la puntilla para este movimiento que aún no se consolida como partido político siéndolo ya, son los reclamos de justicia social que provienen de diferentes sectores de la sociedad dirigidos a López Obrador.

La clase media, los gobernadores, los empresarios, un grupo de académicos e intelectuales y no pocos medios de comunicación que critican acremente la corrupción en el aparato federal, síntesis de que Morena, su Gobierno Federal y sus eventuales candidatos han pasado de la victoria de 2018 a la derrota política en los tiempos de la pandemia.

¡Excelente inicio de semana!

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