ORBE…

Por: Ma. Teresa Medina Marroquín.-

Cuando se ejerce presión a los más destacados líderes de opinión respecto a lo que sucede en este país, estos terminan diciendo: “Estamos en elecciones. Es la causa de todo.”

Ahí, en la disputa del poder, se evaporan los más esplendorosos razonamientos plasmados en los medios de comunicación.

Podría ser así que la codicia por el poder político sea el mayor y moderno pecado capital.

Y como la política es uno de los más jugosos negocios, la conclusión es que cualquier individuo sucumbe a sus infernales tentaciones.

De hecho, cuando el país observa la guerra abierta entre AMLO y los gobernadores, ya no es difícil descubrir que el principal (o el único) sentido de la política es el poder por el poder.

Es increíble, por ejemplo, que el presidente López Obrador, que ha jurado ante la memoria de los más grandes héroes de la Patria, Benito Juárez y Francisco I. Madero, gobernar con honestidad, sea incapaz de resistir los embates de la corrupción.

El país se refiere a los delitos electorales en que incurrieron su hermano Pío y David León, ex coordinador nacional de Protección Civil y presunto director de la nueva empresa del Gobierno Federal responsable del abasto de medicamentos para todo el sistema de salud.

No existe por lo tanto la pureza ideológica de ningún partido político y, por lo tanto, cualquier proceso electoral es en la realidad una guerra donde sólo se disputan los intereses de los poderosos.

Por lo que pueblo sale sobrando, así se prediquen las más excepcionales virtudes de la democracia como una panacea a los más terribles males de un país que en cada elección escucha una nueva sentencia, la que se acumula a la montaña de juicios condenatorios dictados desde un pasado peor de tortuoso que el presente, donde las injusticias ubican a la población en un escenario verdaderamente infernal.

CIRCO Y HUMO

Mañana visita AMLO una parte de Tamaulipas, exactamente dos ciudades de la frontera que son Matamoros y Reynosa, y todo mundo se pregunta cuál será el mensaje para la ciudadanía de esa región norte y obviamente para resto del estado.

La respuesta es sencilla:

Su mensaje será el mismo que se le conoce en las mañaneras de Palacio Nacional: aquí sólo mis chicharrones truenan.

Y al supuesto mensaje esperanzador que se cree mitigará los daños catastróficos de la pandemia reflejados en la economía del estado, sólo quedarán las palabras que ya, desde hace mucho, dejaron de aportar energía y presupuesto.

También es muy probable que el tabasqueño repita la monserga de la corrupción que, utilizada como circo sin pan y cortina de humo, no tarde en dar a conocer un nuevo video en respuesta al de Pío López Obrador exhibido como un corrupto más de la política, incluido el otro sujeto que ya tenía en su poder el monopolio nacional de los medicamentos.

O sea, una caja china, ya sabe usted, que de mayor a menor van saliendo todas poco a poco, resultando cada vez más escandalosas.

CANDIDATURAS EN PRIVADO

Independiente del mensaje que también nos imaginamos dará el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, la solidaridad del presidente López Obrador será no para el pueblo sino para los aspirantes a diputados federales, presidentes municipales y diputados locales por Morena.

Al contrario de los panistas que sigilosamente se preparan para la guerra del 2021, los morenistas no acaban de aprender de la autodestrucción de otros partidos políticos.

No es interés de esta columna abonar a la especulación de tanta gente pendiente de la voluntad de quien en privado revisará (jueves y viernes) la lista de recomendados. Nada gana Tamaulipas, excepto la humillación del “dedazo” que se asoma más discreta que en los tiempos cínicos del PRI.

Viene ahora el llamado de atención de un pueblo que ignorado por un presidente que dice tener siempre la razón, votaría por otras opciones en medio de una economía que hace perder a la gran mayoría.

¿Dónde quedó la esperanza y el bienestar social prometido? Si es hasta finales del sexenio o posterior a los videos repletos de heces y juicios faramallosos, ¿cuál fue el sentido, aquí entre nos, de que los hayan electo dándoles todo el poder?

¡Feliz miércoles!

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