“Salieron como burros sin mecate”, decía DON APOLINAR, vecino de la abuela, cuando los chichillos pasaban corriendo rumbo a la calle sin pedir permiso ni hacer caso de las recomendaciones de los mayores.

Igual decía que los muchachos apenas tenían libertad, porque llegaban a la mayoría de edad, sentían como si les bajaran la tranca y salían como burros sin mecate en busca de aventuras sin precaución alguna ni medir las consecuencias.

Y justo eso parece estar pasando en estos tiempos donde la amenaza del COVID-19 continua pero mucha gente sin hacer caso a las recomendaciones, ni medir las consecuencias, salen a las calles arriesgándose y arriesgando a otras personas al contagio.

Se comenzó a vivir una nueva realidad, muchos establecimientos reanudaron actividades para reactivar la economía pero eso no significa que estemos libres de la pandemia, que podamos salir a la calle sin tomar las medidas necesarias.

Como dijera DON APOLINAR, penas les bajaron la tranca, abrieron establecimientos y la gente abarrotó las calles sin cuidar de la sana distancia, sin cubre bocas. No entienden que sin protección se arriesgan a un contagio y después ya nada será igual.

Si no hacemos caso de las recomendaciones y  nos sentimos libres de hacer lo que nos de nuestra voluntad, sin cuidar de nuestras salud y de quienes nos rodean, se puede venir un problema mayor, nuevamente cerraran establecimientos y las medidas serán más severas para proteger a todos.

Viene a colación lo anterior porque ayer, que por necesidad salí a comprar despensa, con tristeza vi que mucha gente en las calles sin cubrebocas ni cuidar su sana distancia.

Lo peor es que muchos solo salieron a las calles por gusto, sin tener nada urgente que hacer, incluso familias completas con niños pequeños sin ninguna protección poniendo en riesgo la salud de todos.

Cierto es que quizá el confinamiento está desesperando y mucha gente quiere sentirse libre en las calles, pero no miden las consecuencias.

Que se comenzara a reactivar la economía con la reapertura de algunos establecimientos no significa que termina la contingencia de salud, está continua y cada vez hay más contagios razón por la que todos debemos ser conscientes, ayudar a las autoridades.

Entre más cuidado tengamos de nuestra salud más rápido podemos salir de esta crisis, pero si nos relajamos, bajamos la guardia y dejamos de atender las recomendaciones tardaremos más de lo previsto.

Ya hemos visto que los periodos de cuarentena se han prolongado debido al número de contagios, se contabilizan más de 2 mil en nuestro Estado, el COVID sigue galopante, la curva no baja, bueno, ni siquiera se detiene su acenso.

Pero quizá el problema es que muchos creen lo que dijo ANDRES MANUEL LOPEZ OBRADOR que tenían domada la pandemia, mentira, el riesgo de contagio puede estar en cualquier lugar público y de eso es de lo que todos nos debemos cuidar.

Por lo tanto es mejor protegernos y si salimos a la calle hacerlo con precaución atendiendo las recomendaciones de salud. Por el bien de todos no salgamos a la calle, como dijo DON APOLINAR, como burros sin mecate.