Alberto Serna

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- La resolución de conflictos por la vía conciliatoria ha permitido que trabajadores tamaulipecos recuperen más de mil 400 millones de pesos en lo que va del año, una cifra que engloba pagos por indemnizaciones, salarios retenidos, vacaciones y diversas prestaciones, de acuerdo con lo que indica el director de los Centros de Conciliación de Tamaulipas, José Ives Soberón Mejía.

El funcionario explicó que, a lo largo de estos meses, la dependencia ha recibido “más de 24 mil solicitudes de conciliación”, de las cuales “el 82 por ciento se ha solucionado mediante convenio”, mientras que el resto alrededor del 18 por ciento tuvo que enviarse al Tribunal Laboral para continuar el procedimiento.

Calculó que, para cerrar el año, la cifra acumulada rondará las 25 mil solicitudes atendidas.

Soberón Mejía destacó el peso que tiene la conciliación como método para destrabar disputas laborales.

“Un 82 por ciento se han solucionado mediante convenios entre trabajadores y patrones”, reiteró.

Además, subrayó la eficacia del mecanismo frente a los litigios prolongados.

También señaló que el monto recuperado para los empleados aumentó en comparación con el año anterior, “se obtuvieron cien millones de pesos más”, aseveró.

Y es que en 2024 se recuperaron mil 300 millones de pesos y ahora se pasó a mil 400 millones.

Estos recursos corresponden, principalmente, a pagos por indemnización y prestaciones que no se habían cumplido.

Sobre el desempeño del sistema, aseguró que opera sin acumulación de casos nuevos, a diferencia de las antiguas Juntas de Conciliación, que aún siguen resolviendo expedientes rezagados.

En cuanto a la infraestructura, Soberón Mejía mencionó que, por ahora, no está en los planes abrir más Centros de Conciliación, pues consideran suficientes las diez sedes actuales. Sin embargo, admitió que podría analizarse la posibilidad de abrir una o dos oficinas adicionales si la demanda crece el próximo año.

El director resaltó que el avance alcanzado refleja una respuesta tangible a los conflictos laborales y un impulso hacia procesos más ágiles para los trabajadores tamaulipecos.