Por Jaume Osante T.

El paro nacional de productores del campo elevó su tensión este lunes, con bloqueos simultáneos en más de 20 estados del país y denuncias de amenazas por parte de autoridades para frenar las movilizaciones. Agricultores y transportistas advirtieron que, si no hay respuesta inmediata del gobierno federal, extenderán el megabloqueo hacia aduanas, accesos metropolitanos y oficinas públicas.

Las protestas mantienen cerrados tramos de las carreteras 45 Norte en Aguascalientes, Mante–Morelos, González–Aldama, así como vialidades federales en Sinaloa, Hidalgo, Guanajuato, Michoacán y Sonora. También se han registrado cierres en casetas y puntos fronterizos, como la garita Mariposa en Nogales.

Los manifestantes exigen precios justos para sus cosechas, un alto a la inseguridad en rutas de transporte y la revisión de la nueva Ley de Aguas Nacionales, la cual consideran restrictiva para la actividad agrícola. Señalan que el precio actual del maíz no cubre los costos de producción y que las concesiones de agua podrían verse afectadas con la nueva regulación.

El caos ha afectado a miles de ciudadanos: largas filas de vehículos, retrasos de carga, suspensión de viajes y dificultades para el traslado de mercancías básicas. Aunque los agricultores aseguran permitir el paso de ambulancias, persiste la preocupación por la duración de los cierres.

Las organizaciones participantes sostienen que continuarán en las carreteras “el tiempo que sea necesario”, mientras el gobierno ha llamado al diálogo, aunque sin avances visibles hasta ahora.