A MI MANERA
Por Tello Montes
- Diálogo y legalidad: el sello del gobierno de Beto Granados.
En política, cuando los de enfrente se pelean, el poder no se gana: se hereda.
Y eso es justamente lo que está pasando en México —y en particular en Tamaulipas— donde Morena sigue fortaleciéndose mientras la oposición se desangra a mordidas, por sus propios intereses, por sus egos, y por esa vieja costumbre de pensar que el poder es un botín personal y no una causa pública.
Mientras Morena consolida estructura, liderazgo y aprobación con la presidenta Claudia Sheinbaum y el gobernador Américo Villarreal, el resto de los partidos anda en un pleito de vecindad: gritos, reclamos y divorcios a la vista.
Jorge Romero Herrera, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, ya le puso la lápida a la alianza con el PRI. Dijo lo que todos sabían, pero nadie se atrevía a reconocer: que el PRI en vez de sumarles, les resta. Que sus antecedentes y personajes son tan oscuros que manchan cualquier intento de renovación.
Y no le falta razón: ¿quién en su sano juicio quiere abrazarse con un partido que representa todo lo que la gente ya repudió?
Por su lado, el Partido Verde Ecologista también ya amagó con ir solo en 2027. Arturo Escobar lo adelantó y Esmeralda Peña Jácome, su secretaria de Organización en Tamaulipas, lo reafirmó: “estamos listos para competir solos”.
En política, esa frase suena a ruptura maquillada.
El Verde se queja de los malos tratos de Morena en los “repartos” —traducción: no les dieron lo que querían—, pero al mismo tiempo, Peña Jácome les guiña el ojo: “como en toda familia, hay diferencias; hay que sentarnos a negociar”.
Es decir: se van, pero no tanto.
En Matamoros, el presidente del PAN local, René Martínez, se sube al mismo barco del desencanto: admite que la alianza con el PRI diluyó la identidad del blanquiazul y alejó a su base histórica. En palabras simples, perdieron su alma a cambio de unos cuantos votos que nunca llegaron.
Y mientras todos se lanzan culpas, Morena aprovecha el banquete. Luisa María Alcalde, dirigente nacional, lo dijo sin rodeos desde Ciudad Victoria: el PAN está lleno de los mismos de siempre, “cínicos, corruptos, símbolos del PRIAN”. Y remató con bisturí político: “el relanzamiento del PAN fue cambiar el logo, pero no las caras; son los mismos que desprecian al pueblo”.
Duele, pero es verdad.
La oposición parece no entender que el país ya cambió de página. Que mientras ellos siguen peleando por las siglas, Morena se queda con la narrativa, la estructura y el pueblo.
Porque mientras unos reparten culpas, otros reparten resultados. Américo gobierna con cercanía y Claudia Sheinbaum marca récord de aprobación con más de 77% en Tamaulipas.
Esa es la diferencia entre administrar el pasado y construir el futuro.
Así que, rumbo a 2027 y 2028, el panorama es claro: Morena camina en línea recta, y la oposición se tropieza con sus propias ruinas.
Y cuando los adversarios se destruyen solos, no hay necesidad de pelear: basta con esperar.
EN OTRO TEMA, el rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, Dámaso Anaya Alvarado, inauguró en el Campus Tampico la Feria del Libro UAT 2025, consolidada como uno de los eventos culturales más importantes del estado.
Acompañado por Fritz Glockner, director de EDUCAL y representante del Fondo de Cultura Económica, y Luis González Placencia, titular de la ANUIES, Anaya destacó que la feria ha acercado el arte, la lectura y el conocimiento a más de 200 mil visitantes, reflejando el talento y la creatividad de la comunidad universitaria tamaulipeca.
Glockner calificó la feria como “una fiesta de libertad, rebeldía e imaginación”, al ubicarla entre las cinco más relevantes del país. Por su parte, González Placencia reconoció el liderazgo cultural de la UAT y el valor de las ferias universitarias como espacios de diálogo y aprendizaje.
El evento, abierto al público hasta el 2 de noviembre, ofrecerá nueve días de actividades gratuitas, con conferencias, presentaciones de libros, talleres, foros académicos, arte, ciencia y emprendimiento, además de la participación de 25 editoriales nacionales y 10 universitarias.
En esta edición, las Unidades Tecnológicas de Santander (Colombia) participan como invitado internacional.
Con esta iniciativa, la UAT reafirma su compromiso con la lectura, la innovación y la formación integral de las y los tamaulipecos.
Y PARA CERRAR, en Matamoros no hay espacio para el rumor ni para la desinformación. El gobierno que encabeza Beto Granados ha dejado claro que su estrategia no es cerrar puertas, sino abrir canales de diálogo con quienes hacen mover la economía local: los comerciantes y empresarios.
En una conferencia donde participaron las áreas técnicas y de protección civil del municipio, se precisó que el propósito no es sancionar, sino regularizar. Hoy, alrededor del 60% de los negocios en Matamoros operan con algún rezago en permisos,
una cifra que refleja años de desinterés y burocracia. Ante eso, el municipio apuesta por la modernización y la transparencia, con la creación de una ventanilla electrónica que entrará en funciones el 15 de noviembre, para agilizar los trámites de licencias y dictámenes.
El mensaje es claro: los permisos no son un impuesto más, sino una garantía de seguridad, orden y confianza para trabajadores y clientes. Cumplir la ley no solo evita tragedias —como incendios o colapsos—, también fortalece la imagen de una ciudad que crece en armonía con su desarrollo urbano.
Lejos de los rumores sobre cierres o persecuciones, el Gobierno de Beto Granados apuesta por la cooperación. A través del diálogo constante con cámaras, asociaciones y comercios, se construye un Matamoros más seguro, ordenado y competitivo, donde cada negocio legal y en regla se convierte en motor del bienestar común.