Columna Rosa, sólo para Mujeres.
Por: Lic. Bárbara Lera Castellanos.
Tamaulipas ha emergido en los últimos años como un punto nodal estratégico para la infraestructura portuaria y la logística en México, gracias a significativas inversiones y proyectos que impulsan la competitividad regional y nacional.
En 2025, estos avances se han materializado principalmente en la inauguración del Puerto del Norte en Matamoros, la expansión del Puerto de Altamira y la construcción planificada de un puerto seco en Victoria, lo que refleja una transformación integral destinada a consolidar a Tamaulipas como un corredor logístico clave para el comercio internacional.
Uno de los hitos más relevantes es la reactivación y puesta en operación del Puerto del Norte, inaugurado en agosto de 2025 tras más de dos décadas de inactividad.
Este nuevo puerto marítimo, impulsado por una inversión combinada de más de 4,000 millones de pesos entre fondos federales, estatales y capital privado, ha sido diseñado para atender embarcaciones de alto calado, gracias a trabajos de dragado profundo realizados por la Secretaría de Marina.
Con capacidad para operar como un puerto de usos múltiples, el Puerto del Norte se perfila como un nodo logístico binacional que optimiza la conexión con el mercado estadounidense en Texas, funcionando como un puerto alterno al de Brownsville.
Esta infraestructura no solo mejora sustancialmente las rutas de comercio exterior de Tamaulipas y estados vecinos como Nuevo León, Coahuila y San Luis Potosí, sino que también se integra con una red vial y ferroviaria estratégica que fortalece los enlaces terrestres para una logística más eficiente.
Paralelamente, el Puerto de Altamira ha recibido una inversión de 900 millones de pesos destinada a su ampliación y modernización.
El proyecto incluye la expansión de patios, la construcción de muelles y la mejora en la capacidad para manejar contenedores, automóviles y carga general.
Con estas acciones, el puerto aumentará su capacidad operativa considerablemente, con capacidad para movilizar hasta un millón de toneladas de acero y cientos de miles de automóviles anualmente.
Este fortalecimiento es clave para la competitividad del estado en el mercado internacional, generando además empleos y atrayendo nuevas inversiones.
La inversión también contempla la modernización de la aduana y obras de seguridad para facilitar las operaciones logísticas y reforzar la infraestructura portuaria.
En términos de logística terrestre, la construcción de un puerto seco en Victoria, Tamaulipas, representa otra pieza fundamental para la cadena de suministro de la región.
Con una inversión estimada en 500 millones de dólares, este puerto seco contará con infraestructura para bodegas, oficinas y conexión ferroviaria directa con rutas que enlazan hacia Monterrey y Tampico, facilitando el movimiento de carga nacional e internacional.
Este proyecto autorizado por la Agencia Nacional de Aduanas busca fortalecer la infraestructura logística complementaria a los puertos marítimos, creando un espacio de almacenamiento y distribución que optimice los procesos aduaneros y transporte de mercancías.
Estos desarrollos portuarios también están alineados con programas estatales que buscan un manejo sustentable del agua y recursos industriales en las principales ciudades portuarias, lo que evidencia un enfoque integral hacia la infraestructura y sostenibilidad en Tamaulipas.
En conjunto, la inversión pública y privada, la modernización tecnológica y la integración de infraestructuras multimodales consolidan a Tamaulipas como un referente nacional en logística portuaria, marítima y terrestre, incrementando su atractivo como destino para el comercio internacional y contribuyendo al desarrollo económico regional y la generación de empleos.
En conclusión, los proyectos de infraestructura portuaria y logística en Tamaulipas para 2025 evidencian una transformación estratégica que posiciona al estado como un actor crucial en la cadena global de suministro.
La puesta en marcha del Puerto del Norte, la expansión del Puerto de Altamira y la construcción del puerto seco en Victoria reflejan una apuesta decidida por la modernización, eficiencia y sostenibilidad, garantizando que Tamaulipas continúe su crecimiento económico y fortalezca su papel como corredor logístico en el noreste mexicano.