El Patinadero
Juan Antonio Montoya Báez
Dicen que al árbol que da frutos es al que le tiran las piedras, a final de cuentas alguien que no figura y que no destaca por algo en la vida pasa desapercibido.
La exposición en medios o redes sociales de quienes optan por una vida pública ya sean artistas, influencers, creadores de contenido, deportistas, políticos, o funcionarios públicos, genera diversos impactos y en ese tenor de diversos alcances surgen seguidores que pueden ser fanáticos detractores y haters.
Es una moneda en el aire donde hay esas posibilidades de conectar o como se dice actualmente ser cancelada por subirse a un tema o situación controversial. Todo eso lo entendemos como parte de la exposición colectiva al ser visible.
El Rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, DÁMASO ANAYA ALVARADO es objeto de una feroz campaña en redes sociales, de manera anónima hacen señalamientos contra su persona y su familia.
Se siente molesto y con razón, por lo que anuncia que ejercerá acciones legales, por lo que presentará una denuncia ante la Fiscalía General de la República y la Fiscalía General de Justicia del Estado.
“Claro que voy a denunciar a nivel estatal y a nivel nacional”.
La campaña no es solo contra DÁMASO, también es contra su familia y la máxima casa de estudios:
“Sí me molesta que bueno, pues ya hicieron mucho encono con mi familia, con mis hijos. Yo siempre he sido muy familiar, ayer fuimos al cine, salimos a comer, disfrutamos siempre en familia. Pues el tiempo que me queda es dedicado a la universidad. Yo no veo el sentido de las agresiones; yo siempre soy una persona muy ecuánime, muy tranquila. Yo no ando buscando problemas. Así ha sido mi vida en términos generales; pues bueno, ellos también no hallan que sacar y ahora me están atacando con mi familia, pero bueno, creo que no se vale que cualquiera de nosotros sea sujeto a una molestia de ese tipo, sobre todo en el entorno familiar”, agregó.
Dijo que ahora serán las autoridades las que tendrán en sus manos la tarea de ubicar a los responsables y establecer sanciones.
La denuncia de DÁMASO tiene razón de ser, no es contra la libertad de expresión, es contra el libertinaje, el drenaje de las redes. Una cosa es su labor como funcionario y otra muy diferente que hagan ataques personales.
Nosotros como como periodistas podemos ser parte de estas posibilidades donde ciertos temas, investigaciones o publicaciones pueden generar controversia e incluso desacuerdos. Pero en el ejercicio de la información se asume la responsabilidad de lo que se publica bajo una identidad fidedigna, que permite el derecho de réplica incluso para que con pruebas a quien se sienta aludido, tenga la posibilidad de refutar los señalamientos a la información que exponemos.
En este espacio hemos documentado actos de corrupción, enriquecimiento ilícito, nepotismo y abuso de autoridad por mencionar algunos reprobables actos en el desempeño público y que aún seguimos esperando que objete no solo con palabrerías que buscan evadir la realidad, incluso los ciudadanos también perciben, respecto a los contenidos que hemos presentado.
Incluso estas acciones periodísticas las intentan callar desde el anonimato, desde páginas sin identidad y plataformas carentes de veracidad que atacan para intentar intimidar. Personajes ocultos bajo la sombra de su oscuridad y autoexiliados en la difamación que principalmente denigra y denuesta a las mujeres.
Nosotros también denunciamos, y esperamos también respuesta de las autoridades y más cuando en el caso del Rector y el personal, los ataques podrían surgir desde las mismas estructuras. Aquí estamos para hacer causa común.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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