SIN CENSURA
Por: Carlos Carreño Ortiz
Allá por enero de 2019, MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ, entonces alcalde de Matamoros, nos vendió un sueño. Un megaproyecto llamado “polideportivo”, que sería la joya de la corona en su gestión. Un espacio moderno, digno, donde las familias podrían ejercitarse, convivir y sentirse orgullosas de su ciudad. Un símbolo del “nuevo Matamoros” que tanto pregonaba. Pero el tiempo pasó y ese polideportivo jamás llegó. Ni en 2019, ni en 2020, ni nunca.
Pero eso sí, cuando se trató de demoler el estadio Profr. Pedro Salazar Maldonado, un espacio funcional, con historia y arraigo en la comunidad deportiva, no le tembló la mano.
El estadio fue tirado sin miramientos, bajo el pretexto de hacerle espacio al flamante nuevo complejo. ¿El resultado? Un terreno baldío, lleno de polvo, promesas rotas y un hueco más en la infraestructura deportiva de la ciudad.
Seis años después, el único legado visible del polideportivo son un par de renders en redes sociales, algunas fotos promocionales y mucha indignación.
Los más de 100 millones de pesos que supuestamente se invertirían en el proyecto desaparecieron entre excusas, opacidad y desmemoria institucional.
El “gran proyecto” nunca se ejecutó, y nadie ha rendido cuentas.
Es curioso: durante sus dos administraciones, MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ, alias «La Borrega», hoy diputado federal por el Partido Verde, se especializó en hacer anuncios espectaculares.
Y es que prometía obras millonarias como quien reparte folletos. Pero al momento de entregar resultados, su gestión se diluyó en la nada. Pura simulación, pura pose.
¿Dónde está el dinero? ¿Quién autorizó el gasto? ¿Quién se benefició del derribo de un estadio que sí servía, para reemplazarlo con nada? ¿Dónde está la Auditoría Superior del Estado? ¿Dónde están los organismos de fiscalización?
La historia del polideportivo fantasma no es sólo una anécdota de promesas incumplidas. Es un símbolo de cómo se gobierna con propaganda en lugar de hechos. De cómo se castiga a la ciudad por medio de la omisión. De cómo se engaña, se desmantela y se olvida.
Para MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ, proyectar una buena imagen de Matamoros ha significado sólo eso: proyectar. Como si bastara con una pantalla, un par de renders y una conferencia de prensa. La realidad, sin embargo, no se maquilla. El terreno sigue ahí: baldío, triste, y más elocuente que cualquier discurso.
Y mientras tanto, el único deporte que dejó MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ fue el de prometer y nunca cumplir.
En otros temas, el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA llevó a cabo este lunes la inauguración del nuevo gimnasio-auditorio de la Escuela Normal de Educadoras «Estefanía Castañeda», en Ciudad Victoria, obra en la que se invirtieron más de 11.9 millones de pesos.
El ejecutivo estatal destacó que la Normal de Educadoras es una institución orgullo de Tamaulipas, que trasciende a nivel nacional porque resguarda y difunde la herencia profesional y el amor a la educación de la maestra Estefanía Castañeda.
“Con ustedes y gracias a ustedes estamos recuperando la educación como derecho, como fuente de equidad y movilidad social y, por supuesto, como el motor importantísimo para crear prosperidad compartida, una ciudadanía ética, humanista, que preserva valores esenciales para la paz y la convivencia”, dijo AMÉRICO VILLARREAL.
Vale la pena anotar que esta obra fue iniciada hace más de tres décadas por el gobernador de la época, ingeniero AMÉRICO VILLARREAL GUERRA, quien construyó los cimientos y la techumbre.
“Hace más de 30 años, un gobernador de voluntad y trabajo, el ingeniero AMÉRICO VILLARREAL GUERRA, entregó en este mismo lugar una techumbre que por años fue refugio y punto de encuentro de la comunidad normalista, y hoy aquel legado, que se convirtió en un símbolo de confianza en el futuro, es honrado y prolongado por nuestro gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA”, expresó el secretario de Obras Públicas, PEDRO CEPEDA ANAYA.
El funcionario estatal especificó que el gimnasio “Ing. Américo Villarreal Guerra” consta de 877 metros cuadrados de construcción, convirtiéndose en un recinto completo con muros y acabados de calidad, gradas, foro, sanitarios y vestidores, instalaciones eléctricas e hidrosanitarias, aire acondicionado, subestación eléctrica, sistema de sonido y techumbre impermeabilizada con membrana termoplástica.
Hasta la próxima.