Alberto Serna

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- La zona fronteriza de Tamaulipas ha emergido como uno de los escenarios más peligrosos para las fuerzas castrenses del país, al registrar un repunte de agresiones directas por parte de presuntos miembros del crimen organizado en lo que va del año.

Entre enero y los primeros días de junio de 2025, elementos del Ejército Mexicano fueron blanco de 22 ataques armados en territorio tamaulipeco, según datos oficiales proporcionados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Estas emboscadas tuvieron lugar en puntos identificados como de alta conflictividad, con una clara concentración en Nuevo Laredo, donde se documentaron 14 de estos incidentes.

Otros municipios que registraron agresiones fueron Mier y Miguel Alemán, con dos casos cada uno, además de Reynosa, Camargo, Jiménez y Díaz Ordaz, donde se reportaron hechos de forma aislada.

Los informes de la Sedena indican que las agresiones se dirigieron específicamente contra unidades del Ejército durante labores de patrullaje o despliegues tácticos. En todos los episodios, los militares respondieron haciendo uso de la fuerza letal, conforme a lo dispuesto por la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza.

Como saldo de estas acciones, se reportan 10 presuntos agresores abatidos, cuatro militares lesionados y un civil herido. La institución castrense precisó que estos eventos son clasificados como «agresiones» y no «enfrentamientos», distinción que reservan para choques entre grupos delictivos rivales. En cambio, las agresiones refieren a ataques directos contra fuerzas del orden, tanto federales como estatales.

“La participación del Ejército Mexicano en tareas de seguridad pública se lleva a cabo respetando el marco legal vigente, con el objetivo prioritario de salvaguardar la vida humana”, establece el reporte militar.

Sin embargo, la relación entre abatidos y detenidos donde no se reporta la captura de ningún agresor ha despertado atención entre organizaciones defensoras de derechos humanos, que observan con cautela la alta letalidad de estos operativos. Pese a ello, la Sedena insiste en que sus actuaciones se mantienen dentro de los márgenes legales y bajo supervisión interna.

Por razones de seguridad nacional, la Secretaría no reveló la cifra de efectivos destacados actualmente en Tamaulipas, aunque confirmó que las operaciones continúan en coordinación con las zonas militares y destacamentos estratégicos ubicados en Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Ciudad Victoria y San Fernando.