Prácticamente se está a horas de que se lleve a cabo la histórica y a la vez cuestionada Elección Judicial, un proceso que dejará más dudas que certeza sobre la validez de cada voto, pues de entrada el que no se desechen las boletas en blanco y no se tengan escrutadores u observadores o que no se contaran y publicaran los votos con cartulina en las casillas ya hace demasiado ruido.

Terminaros las campañas con más pena que gloria, como iniciaron acabaron, sin resolver dudas, sin que la totalidad de los aspirantes a juzgadores de perdido les conociera el pueblo, ya de propuestas o que se conociera que les avala, mejor ni hablamos, la mayoría pasaron de noche.

Concluidas las campañas, que por cierto no motivaron mucho en lo general, se está en el umbral de la votación y hay quienes dicen que puede haber boicot para la Elección Judicial, lo real es que la elección nació boicoteada, no hay necesidad de que nadie ajeno al proceso meta las manos para testerearles.

Eso de que puede haber boicot son más ganas de hacer ruido que estar ciertos de que algo así pudiera suceder, incluso, los de la CNTE que dijeron lo harían, en un arranque de desesperación y como manera de presión para que atiendan sus demandas, ya se desdijeron, aseguraron los líderes de la Coordinadora Nacional que no intervendrán, por lo tanto, no los podrán culpar de lo que suceda el día de la elección.

Tampoco se cree que gente de la derecha, con todo y que RICARDO ANAYA llame a no votar, tengan la capacidad de boicotear una elección federal que estará, por el lado que se vea, más que protegida para que los resultados sean los esperados.

Y claro que sí hay ciudadanos que asistiremos a las urnas, es vivir, para bien o para mal, el momento histórico, es información de cómo se desarrollará y como vivirá la sociedad el momento, incluso quienes serán los que acudan voluntariamente o cooptados a votar, decidir si se vota o anula la boleta ya es cuestión de cada quien.

Aparte, con no asistir a votar la Elección Judicial no se cancelará ni el resultado de la misma cambiará, la percepción del respetable es que en ese proceso todo está dicho. Y si, será una jornada larga, aunque acuda poca gente a votar son muchas boletas las que se hay que tachar, en este caso, numerar.

Ojalá a los adultos mayores no les dejen tanto tiempo parados o en las inclemencias del sol pues pueden tener una baja en su salud, si los llevan a votar que les cuiden y tampoco les llamen la atención si, por su edad o algún mal, no tachan el cuadro que deban de tachar.

En fin, la situación es que, para bien o para mal, en dos días se llevará a cabo la primera Elección Judicial de la historia de este México lindo y querido, seguramente habrá contratiempos, es normal en un ejercicio nuevo, ¿qué habrá inconformidades?, claro que las habrá, señalamientos muchos más pues son bastantes puntos los que se ven muy extraños.

Cierto, esta Elección Judicial da la oportunidad a muchas y muchos amantes de las leyes, que en otras circunstancias por carecer de padrinos políticos jamás podrían aspirar a formar parte la Suprema Corte, Poder Judicial en alguna Entidad o hasta jueces, pero también es verdad que muchos de los que resultaron beneficiados por “la tómbola” no son los más aptos o mejor calificados para impartir justicia de manera imparcial.

Pero la Elección Judicial, con todo y sus asegunes, el domingo 1 de junio se realizará, se duda que sea boicoteada, de entrada, no hay suficientes valientes ni fuerzas políticas con recursos que les alcancen para eso en todo el país.

Por lo tanto, eso de un posible boicot a la Elección Judicial es más show, una justificación por el cómo se desarrolle el proceso, lo real es que no sucederá, pues a nivel nacional, los panistas solo gritan, pero poco actúan, los priistas están visto que dicen una cosa y hacen otra, los de la CNTE ya se desdijeron, y el pueblo en su mayoría, de acuerdo o no con el proceso, está pasivo en ese sentido.