*.-Encargados de atender a la gente, lo hacen mal y de mal humor, lo que genera largas filas y un profundo malestar contra el Instituto.

Por Alberto de la Fuente.

CD. VICTORIA, TAM.-El Instituto Mexicanos del Seguro Social, (IMSS), una institución que nació para servir y dar una atención médica a Trabajadores obreros y campesinos y que con sus aportaciones, generan empleos para médicos, enfermeras, químicos, afanadoras y farmacéuticos, pero estos últimos, pareciera que le tienen odio a quienes deberían servir, pues los tratan con la punta del pie, así sean discapacitados, ancianos o mujeres en gravidez.

A todos los tratan por igual, lo que genera un gran descontento, por lo que se sienten agraviados y este día que nos tocó estar por ahí, comprobamos que pesa más en los derechohabientes la mala atención de los encargados de farmacia que la falta de medicamentos que también es un problema grave que tiene el IMSS.

Esta pésima atencion genera un gran problema entre los derechohabientes que tienen la desgracia de hacer largas filas sin distinción, pues no todos están en condiciones de esperar hasta horas de pie, apoyados con un bastón o deslizarse en sillas de ruedas con su propio esfuerzo.

Esas personas deberían de ser atendidas de inmediato y no ser al llegar hasta burla de quienes tienen la obligación y el deber de recibirlas con calidez en el servicio, pero, al contrario, este departamento de farmacias carece de este sentido humanista que tanto hablan en sus discursos el gobernador Amerco Villarreal Anaya y la Presidenta Claudia Sheisman Pardo.

Las denuncias y lamentaciones están a la orden del día y más a media mañana, los testimonios de la gente son de angustia y un profundo malestar como el de Don Jacinto de León: «Desde muy temprano ando por aquí, todo bien, pero me pase un buen rato haciendo fila, al llegar no había tamsilusina, le dije que la vez pasada también me fallaron y salí regañado», señalando también que no es la primera vez que hace corajes, ya no tanto por la falta de medicamentos, que es casi siempre, sino por el mal trato de los encargados de farmacias que traen sus problemas de casa y se desquitan con ancianos y personas discapacitada que son obligada a realizar filas y luego para decirles de mala manera que es todo lo que hay, que regresen otro día.

Es urgente que la Dirección General del IMSS tomen cartas en este asunto, pues no es lo que se pregona en cuanto a calidad y calidez en el servicio, al contrario hay un descontento generalizado entre la población de derechohabientes.