Victoria y Anexas/Ambrocio López Gutiérrez/

El nuevo titular de la Secretaría de Educación de Tamaulipas es una persona formada profesionalmente en instituciones privadas y públicas, ha asesorado organismos privados y gubernamentales, ha sido docente y directivo en instituciones educativas particulares y oficiales. Se ha desempeñado con distintas responsabilidades en Nuevo León, Chihuahua y Tamaulipas. El doctor Miguel Valdez García fue formado en las aulas lasallistas, es un tipo que cree en el orden y, quien le nombró para su flamante cargo, seguramente consideró su personalidad casi religiosa para ocupar un espacio donde imperaba el caos administrativo del que se responsabiliza al equipo “licencioso” que encabezaba la maestra Lucía Aimé Castillo Pastor quien soportó varias embestidas de los profesores que encabeza aun Arnulfo Rodríguez Treviño.

Quién mejor que él mismo para definirse como una persona de formación bastante versátil: “Soy humanista, pensador, pedagogo, pero sobre todo educador con 30 años de experiencia. He sido profesor desde preescolar hasta posgrado. Fui director de primaria, secundaria, preparatoria y rector de varias universidades privadas y públicas. Director del programa Líderes del Mañana del ITESM. Me preparé como normalista, luego cursé la licenciatura pedagógica en La Salle, además de la maestría en educación y el doctorado en innovación educativa en el Tec de Monterrey. En la administración pública fui subsecretario de educación superior además de asesor del secretario, he participado como consejero en Nafinsa, Bancomext, Canacintra y Chihuahua Futura. Siempre he colaborado con diversos medios informativos como columnista y editorialista especializado en los medios educativos especialmente con temas educativos”.

Parte del currículum del doctor Miguel Valdez García: -Licenciado en Ciencias Religiosas por la Universidad La Salle de México. -Licenciado en Educación Media con especialidad en Español por la Normal Superior FEP. -Licenciado en Ciencias de la Educación por la Universidad Autónoma de Nuevo León. -Maestría en Educación con especialidad en Desarrollo Cognitivo en la Universidad Virtual del Tecnológico de Monterrey. -Doctorado en Innovación Educativa en la Escuela de Graduados en Educación en el Tecnológico de Monterrey. Actividad docente y profesional: Maestro de educación básica en los grados de 2º, 5º y 6º de primaria.  Maestro de secundaria en 1º, 2º y 3º grado con las asignaturas de español y Formación de valores. Maestro de Bachillerato con las materias de Individuo y sociedad, Lectura y redacción y Métodos de investigación. Catedrático de profesional y posgrado con las materias de Dimensión humana, Metodología de la investigación cualitativa, Didáctica general, Desarrollo curricular. 

El titular de la SET ha publicado textos diversos donde demuestra su conocimiento de la ideología social cristiana y su preocupación permanente por la vinculación de la religión con la sociedad: “Los principios permanentes de la doctrina social de la Iglesia constituyen verdaderos y propios puntos de apoyo de la enseñanza social católica, se trata del principio de la dignidad de la persona humana, en el que cualquier otro principio y contenido de la doctrina social encuentra fundamento, del bien común, de la subsidiaridad y la solidaridad. La Iglesia ve en el hombre, en cada hombre, la imagen viva de Dios mismo, por ello ha recibido de Dios mismo una incomparable e inalienable dignidad trascendente de la persona humana. En ningún caso la persona humana puede ser instrumentalizada para fines ajenos a su mismo desarrollo que puede realizar plena y solo en Dios y su proyecto salvífico: el hombre en efecto en su interioridad trasciende el universo y es la única criatura que Dios ha amado por sí misma.

POR ESTA RAZÓN, ni su vida, ni su desarrollo de su pensamiento, ni sus bienes, ni cuantos comparten sus vicisitudes personales y familiares pueden ser sometidos a restricciones en el ejercicio de sus derechos y su libertad. De la igualdad de todas las personas deriva, en primer lugar, el principio del bien común al que debe referirse todo aspecto de la vida social para encontrar plenitud de sentido. Según una primera y vasta acepción por bien común entendemos el conjunto de condiciones de la vida social que hacen posible a las asociaciones y a cada uno de sus miembros el logro más pleno y más fácil de la propia perfección. El bien común se puede considerar como la dimensión social y comunitaria del bien moral. Por ello una sociedad que en todos sus niveles quiere positivamente estar al servicio del ser humano es aquella que se propone como meta prioritaria el bien común en cuanto bien de todos los hombres y de todo el hombre.

Entre las múltiples implicaciones del bien común, está la del destino universal de los bienes. En este principio está la base del derecho universal al uso de los bienes. Todo hombre debe tener la posibilidad de gozar de bienestar necesario para su pleno desarrollo el principio del uso común de los bienes, es el principio de todo ordenamiento ético social. Sobre la subsidiariedad la Iglesia sostiene que como no se pueden quietar bienes a los individuos y darlo a la comunidad lo que ellos pueden realizar con su propio esfuerzo e industria, por eso todas las sociedades de orden superior deben ponerse en actitud de ayuda respecto a las menores. Así la subsidiaridad como ayuda económica, institucional, legislativa, ofrecida a las entidades debe ser alentada y promovida”.

En el periódico El Heraldo, MVG ha reseñado las tareas de la cúpula católica: “En las redes sociales del Episcopado Mexicano se nos informa que ha comenzado la CXVII Asamblea plenaria del Episcopado Mexicano, en la bonita casa que tiene en Lago de Guadalupe en el Estado de México, un momento clave en el caminar de nuestra Iglesia de México. Donde se reúnen todos los Obispos del País para reflexionar sobre el camino sinodal recorrido durante el trienio 2021-2024, evaluar los frutos alcanzados y proyectar con esperanza y decisión el futuro de nuestra misión pastoral. En comunión con los procesos sinodales universales y atentos a los desafíos y realidades de nuestro pueblo, los obispos buscan fortalecer los vínculos de fraternidad y solidaridad manteniendo el enfoque de una iglesia que camina junta cercana a las comunidades y comprometida con una evangelización que responda a las necesidades actuales.

SIN DUDA QUE uno de los temas será la revisión de su proyecto de pastoral 2030. Este proyecto comienza con una mirada de la realidad que los OBISPOS hacen con ojos y corazón de pastores para acercarse a la realidad del mundo y del Pueblo de Dios, es el punto de partida para apacentar y un lugar sagrado para sus pastores porque en ella se encuentran las alegrías y las esperanzas más profundas, además ahí contemplamos los dolores, las luchas y los sufrimientos más sentido. Queremos acercarnos a ella con los ojos bien abiertos para contemplar este bendito espacio de vida, alertar bien nuestros oídos para escuchar los gritos de nuestro pueblo y encender nuestro corazón para acoger con fe y profundo amor, la voz del señor que se manifiesta a través de ella.

En este Plan de pastoral los Obispos reconocen que el proceso de esta transformación que vivimos trae consigo cambios que incluso ellos Obispos y muchos presbíteros no alcanzan aún a comprender, por lo que es muy difícil tener una respuesta adecuada y pronta ante la profundidad y rapidez con la que están sucediendo. Los Obispos animan nuestra Esperanza pues ante estas realidades se asumen con corazón de padres y hermanos esta oportunidad con una profunda confianza mas no con ingenuidad sino con los ojos de la fe y corazón de Pastores que han de conocer las necesidades del Pueblo Cristiano para involucrarse en ellas y potenciar todas aquellas iniciativas que favorezcan la presencia real del Reino de Dios”.

Admirador de la cultura empresarial, MVG ha expresado por escrito su admiración por el  por el patriarca de los neoleoneses emprendedores: “En el marco del 80 aniversario del ITESM se entrega el premio Eugenio Garza Sada, quien fue el fundador del Tec de Monterrey y como señala Asael Villanueva, portador de una filosofía de vida. Don Eugenio en su ideario Cuauhtémoc hacía una invitación a reconocer el trabajo de los integrantes de una empresa. Resaltaba los beneficios del trabajo y decía que debía disfrutarse más allá de sólo ser una fuente de ingresos. Don Eugenio creía que las empresas debían impulsar el desarrollo social, siendo la fundación del Tec de Monterrey una apuesta por transformar la sociedad desde la educación.

EL IDEARIO CUAUHTÉMOC es un grupo de principios y conceptos personales escritos por don Eugenio que buscan trascender generando valor económico y social. Reconocer el mérito de los demás y señalarlo de manera espontánea, pronta y pública. Usurparse ese crédito, atribuirse a sí mismo méritos que corresponden a quienes trabajan a las órdenes propias, sería un acto innoble, segaría una fuente de afecto e incapacitaría para comportarse como corresponde a un ejecutivo. Controlar el temperamento teniendo la capacidad para dirimir pacífica y razonablemente cualquier problema o situación por irritantes que sean las provocaciones que haya que tolerar.

Quien sea incapaz de dominar sus propios impulsos y expresiones, no puede actuar como director de una empresa. El verdadero ejecutivo abdica del derecho a la ira. Nunca hacer burla ni de nada ni de nadie, evitar las bromas hirientes o de doble sentido. Tener en cuenta que la herida que asesta un sarcasmo nunca cicatriza. Ser cortés no es protocolario, pero sí atento a que los demás encuentren los gratos momentos de la compañía. Ser tolerante de las diversidades que puedan encontrarse en la raza, color, modales o educación o idiosincrasia de los demás. Ser puntual, quien no puede guardar sus citas muy pronto se constituirá en un estorbo. No ser vanidoso, un ejecutivo no puede exhibir arrogancia ni autocomplacencia. No alterar la verdad, lo que uno afirme debe hacerlo reflexionando y lo que prometa cumplirlo.

Las verdades a medias pueden ocultar errores, pero por poco tiempo. Dejar que los demás se explayen, especialmente los colaboradores, hasta que lleguen al verdadero fondo del problema, aunque tenga que escuchárseles con paciencia durante una hora. Expresarse concisamente y con claridad. Depurar el vocabulario. Asegurarse de disfrutar el trabajo. Reconocer el enorme valor del trabajador manual. Pensar en el interés del negocio más que en el propio. Análisis por encima de la inspiración o la intuición, la dedicación al trabajo. Ser modesto. Todo el ideario de don Eugenio se puede resumir en la frase que plasmó: El respeto a la dignidad humana está por encima de cualquier consideración económica. Hoy a más de 50 años de su partida el tiempo magnifica su legado y enaltece su memoria”. Hasta aquí una pequeña parte de las ideas del nuevo responsable de la educación en Tamaulipas. Que Dios le ilumine y le acompañe en su nueva cruzada por elevar la calidad educativa en todos los planteles a su cargo.

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