DESDE ESTA ESQUINA.
MELITON GUEVARA CASTILLO.


México esta viviendo un momento especial, crucial, porque se están definiendo contextos y
procesos que van a marcar el rumbo del gobierno federal. Aquello de que no somos iguales,
ya no pueden ni siquiera mencionarlo. Eso de que no me vengan con que la ley es la ley, ya
se convirtió en obsoleto, porque lo que impera, sin ambigüedades, es la complicidad
política hasta en los problemas de tipo penal. Un día Omar García Harfuch sentencio una
verdad de Perogrullo: para que los delitos disminuyan o se eliminen hay que detener a
quien los comete.
Nadie, creo, puede discutir la sentencia del secretario de Seguridad, por eso, uno y otro día,
hace notar la detención de personas que han violado la ley, de la destrucción de laboratorios
clandestinos para elaborar drogas. Y efectivamente, por ese tipo de acciones, la presidenta
Claudia Sheinbaum puede presumir que hay disminuido los crímenes en el país… es más,
ya hasta presumió que Guanajuato dejo de ser el estado con más asesinatos diarios.
HACER BIEN EL TRABAJO.
En el contexto hay mucho material. De siempre se ha dicho que la justicia se vende, que los
jueces se prostituyen por dinero, que por eso buen numero de delincuentes entran y salen de
inmediato del penal, porque un juez corrupto los deja libres. Con ese argumento, por
ejemplo, se atizo a la reforma del Poder Judicial, para acabar con la corrupción de los
jueces. Sin embargo, una y otra vez, los jueces machacaron que los expedientes que les
envían las fiscalías están mal integrados. En fin, recordemos lo que sucedió con Rafael
Caro Quintero; salió libre, una vez, porque su delito no fue revisado, juzgado, por el juez
correspondiente. ¡Así de sencillo! ¿A quién culpamos?
Para la correcta aplicación de la justicia, aquí y en China, se necesita que los dos elementos
se complementen: que los perseguidores de los malos, hagan bien las cosas; que
investiguen debida y correctamente, que no dejen nada al ahí se va. Precisamente para que
los jueces no tengan para donde hacerse, para que no encuentren recovecos de la ley y la
burlen. Pero, si la fiscalía no hace bien las cosas, ellos ya están burlando a la ley, no quieren
que se castigue al infractor y le dan al juez elementos para que lo liberen.
EXPEDIENTE FALLIDO.
Acaba de suceder un hecho insólito que, creo no hay la menor duda, solo sucede en
México: Cuauhtémoc Blanco, de quien dicen fue un excelente jugador de futbol, está
demostrando que también es buen político, puesto que logro que todo un partido político,
toda la 4T, lo blindara para que no sea juzgado por un delito del fuero común. Fue todo un
espectáculo ver en la Tv las escenas de mujeres protegiéndolo para que pudiera hablar. Y es
que, primero la Comisión Instructora, no encontró elementos para quitarle el fuero, luego el
pleno ratifico dicha postura.

El problema es que, el mismo presidente de la comisión instructora fue categórico: la
fiscalía no integro bien el expediente, y por esas razones no podían quitarle el fuero.
¡imaginen! Un fiscal enemigo del exfutbolista no hizo bien su trabajo, inicio expediente y
solicito el fuero sin tener argumentos sólidos… claro, si le creemos a los diputados que
protegen al exfutbolista.
CAMPO DE EXTERMINIO.
El caso Teuchitlán es un verdadero polvorín. Al final puede que la verdad no sea conocida,
como sucedió con la famosa verdad histórica de los normalistas de Ayotzinapa: no sabemos
donde quedo la bolita, unos y otros políticos, entre fiscales y juzgadores, la escondieron. Y
creo que lo mismo va a suceder con el rancho Izaguirre: para las buscadoras de
desaparecidos es un campo de exterminio, para el gobierno solo de adiestramiento. La
cuestión es que, en el caso del gobierno, sabemos que históricamente buscan ocultar la
información… no quieren que nada manche su forma de gobernar.
Pongo solo un caso: Estados Unidos una y otra vez insistió en que México producía drogas,
en tanto que AMLO, una y otra vez, lo negó, al grado que los chapitos hasta hicieron
publicar mantas para decir que ellos, efectivamente, no fabricaban drogas, menos fentanilo.
Sin embargo, hoy la realidad es bien distinta: Omar García Harfuch, así como la Sedena y
la Marina, han publicitado el desmantelamiento de laboratorios clandestinos 13 en un día,
otros tantos otro, y el caso es que la Marina un día informo que desmantelo un laboratorio
clandestino de 395 metros cuadrados en Zacatecas.
TAPAR EL SOL CON UN DEDO.
Se han dado a conocer historias de políticos, gobernadores, fiscales, titulares de seguridad,
que han sido detenidos, procesados y encontrados culpables de complicidad con la
delincuencia. Eso difícil de ocultar o de negar, quizá por eso, el gobierno de los Estados
Unidos una vez que recibió a 29 narcotraficantes, ahora cuentan que pide les manden a
políticos cómplices. Incluso, las filtraciones, indican que esta petición ya es formal… La
cuestión es sola una: fiscales y jueces, como políticos, ocultan la verdad y se convierten en
cómplices de la delincuencia.