De sensatos es medir con quien agarraras pleito, escoger las batallas que puedas librar ya que de lo contrario tu estabilidad se pone en riesgo, por ello en algunos casos es mejor llevar la fiesta en paz, si hay algún mal entendido arreglarlo, si hay deuda, negociar.
No te puedes pelear con tu vecino y socio si le debes dinero porque se puede cobrar a lo chino, tampoco es bueno aplicar la dichosa les del talión, ojo por ojo diente por diente, porque en ese pleito se puede quedar ciego y chimuelo, destrozado.
Tampoco es bueno envolverse en la bandera y evocar una soberanía que solo invocan los políticos cuando necesitan que el pueblo se llene de fervor patrio y salga a pelear por algo que no provocó, pero para que los próceres den la impresión al mundo que el respetable les respalda los manipulan, en casos peores, la mayoría de los concentrados van en contra de su voluntad, son acarreados.
Lo anterior viene a colación porque luego de que el gobierno del país vecino, Estados Unidos, hizo valida la amenaza y entraron en vigor los aranceles del 25 por ciento a muchos productos mexicanos el gobierno federal dice que responderá con la misma moneda, es decir, que impondrá medidas arancelarias y hasta demandara a su vecino y socio comercial.
Una guerra arancelaria será fatal para ambos países, cierto, quien lleva más las de perder es este México lindo y querido y su gente, no solo los empresarios o productores sufrirán el que no se llegará a buenos acuerdos, el pueblo en general pagará las consecuencias, la carestía estará a la orden del día, la recesión económica será la realidad, capitales extranjeros se irán y se verá más desempleo e inseguridad
Y todo porque los vecinos creen que México no cumplió con el pacto por el cual se emplazaron los aranceles y dicen que el fentanilo sigue llegando a su país en grandes cantidades y matando miles de sus conciudadanos.
Ante ello, la entrada en vigor de los aranceles, la presidenta CLAUDIA SHEINBAUM convoco a una asamblea informativa el próximo domingo, muchos días perdidos en los que se pueden perder millones de pesos. Aparte, una marcha y cantar el himno nacional mexicano no asustara TRUMP. Claro, es bueno despertar el patriotismo, lo malo es que se duda que sirva de algo. Más que un mitin se requiere de una estrategia firme.
Aparte, en el mitin o asamblea informativa como le llaman, prácticamente la mandataria nacional les hablara a los suyos, a los de su partido y aliados, no al pueblo en general.
Cierto es que la manifestación convocada por el gobierno federal, llamará la atención de todos los mexicanos y más allá de las fronteras, pero se ve un asunto más mediático que efectivo, aparte, costará mucho dinero que bien puede utilizarse en acciones de beneficio social. No se trata de un concurso de populismo, porque a eso también le entiende bien el presidente gringo, se trata de buenos acuerdos entre las dos naciones.
Más que marchas y manifestaciones lo que se requiere es de buenas y concretas negociaciones, que se cumplan los acuerdos, que no se le quiera ver la cara a nadie.
Es verdad que en esta administración se acabó el abrazo no balazos con los entes del mal, la estrategia de seguridad implementada actualmente ha permitido detener delincuentes y acabar con sus financiamientos, pero TRUMP quiere acabar de raíz con todo, sabe que el problema del fentanilo inicio en la pasada administración, entonces, los culpables, quienes permitieron que eso creciera, son los que deben pagar, a los que el gobierno federal deben de entregar y no solo a los delincuentes del pasado.
Con entregar a los culpables sí se llevaría la fiesta en paz con los vecinos, principales socios comerciales y prestamistas, ni gringos ni mexicanos tendrían que pagar las consecuencias de una guerra arancelaria, se insiste, no es bueno el ojo por ojo y diente por diente, nunca es buena la ley del talión, tampoco las guerras que no se puedan ganar.