C R O N I C A S P O L I T I C A S
Por Alberto Guerra Salazar
CIUDAD VICTORIA, (ASI).— Dicen que las comparaciones son odiosas, pero es inevitable establecer un parangón entre el sexenio de Américo Villarreal Guerra y el de su hijo Américo Villarreal Anaya, quienes con una diferencia de 35 años, tuvieron en sus manos el manejo de los destinos del Estado.
Américo padre tuvo una prueba de fuego con un motín de reos en el penal de Matamoros que produjo casi 20 muertos y lo salvó de la renuncia o destitución, la astucia política del entonces director de gobierno Pedro Silva Rodríguez.
Américo hijo, con apenas dos años de gestión gubernamental, enfrenta ahora una campaña de lodo que quiere hacer aparecer como inminente su renuncia o destitución bajo diferentes pretextos.
Le ha faltado al médico Villarreal Anaya un operador político que se adelante a los pasos de sus enemigos para hacerlos tropezar y caer, lo que ha redundado en la fabricación de una imagen precaria del jefe político del Estado.
Américo apenas está aprendiendo a conducirse como jefe del poder ejecutivo local, pero ya está desatada una fiebre por la sucesión que ha contagiado lo mismo a JR Gómez Leal que a Olga Sosa, Maki Ortiz Domínguez, más los que se acumulen.
Eso, para no hablar de los actores políticos que militan en partidos de oposición y de sus respectivos caudillos, Cabeza de Vaca en el caso del PAN, y Manuel Cavazos Lerma si hablamos del PRI.
La ventaja de MORENA es que el Gobernador Villarreal Anaya está haciendo un buen trabajo, sin asomos de corrupción ni ineficiencias insalvables. Están dadas las circunstancias para que se produzca una continuidad gubernamental.
Por supuesto, las cosas se facilitarán si postulan para la sucesión a un político (a) con méritos suficientes, identificado (a) con las causas populares, de arraigo, carisma y capacidad para hacer una buena gestión.
Si se confirma que le toca a una mujer ocupar la jefatura gubernamental de Tamaulipas, las cosas se simplificarán todavía más, pues existen magníficos elementos entre el sector femenil, tanto en la frontera como en el centro y en el sur del Estado.
Los ejemplos están a la mano: Carmen Lilia Cantúrosas Villarreal, Olga Sosa, Maki Ortiz Domínguez, esta última nacida con corazón azul pero convertida convenientemente al morenismo.
En lo que se refiere al PRI y el PAN, el pragmatismo los obligará a confirmar la alianza pactado en el pasado reciente, para unir esfuerzos y postular a un candidato común que les haga menos penosa volver a caer derrotados.
La mención de Carmen Lilia nos hizo recordar que la presidenta municipal de Nuevo Laredo reunió a los representantes de dependencias de los tres niveles de gobierno, para ponerse de acuerdo e implementar un operativo de protección a la población.
La masa de aire polar que asuela a Tamaulipas obligó al gobierno de Nuevo Laredo a tomar una serie de medidas extraordinarias en beneficio de los ciudadanos, especialmente los que pertenecen a segmentos vulnerables.
De entrada, Carmen Lilia dispuso la habilitación de refugios temporadas usando edificios públicos, para dar cobijo a personas en situación de calle, proporcionándoles alimentos calientes y suficientes cobertores.
También se realizan recorridos por calles céntricas, plazas y otros centros de concentración popular, para invitar a indigentes que duerman a la intemperie, a usar los albergues oficiales.
Por su parte, la Universidad Autónoma de Tamaulipas invitó a la comunidad a usar los gimnasios multidisciplinarios de sus diferentes campus en el Estado, pues están abiertos para estudiantes pero también para usuarios externos.
Se pueden practicar ciclismo de interior, trampolín, zumba, step y físico constructivo. En el campus Mante se imparten box, spinning, ritmos latinos, taichí, jumping y crossfit.
En tanto que en Tampico, los alumnos tienen acceso a actividades como acondicionamiento físico, box, yoga, zumba, pilates, kick boxing, karate do, salsa, etcétera.
Correo electrónico: [email protected]