Enrique Jonguitud 

Ciudad Victoria, 2 de octubre.-El Congreso de Tamaulipas aprobó hoy una reforma constitucional para recuperar la autonomía y derogar la obligación de que la mayoría de los 43 ayuntamientos locales tengan que avalar reformas a la Constitución Política del Estado.

En la primera sesión ordinaria de la 66 legislatura, la reforma fue aprobada por 27 votos a favor de Morena, Partido del Trabajo, Partido Verde y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), esto porque la diputada priista Mercedes del Carmen Guillén rompió la alianza con el Partido Acción Nacional (PAN) y se alineó al bloque morenista al apoyar la iniciativa.

En tanto los seis diputados del PAN votaron en contra, y los dos diputados de Movimiento Ciudadano, Juan Carlos Zertuche y Mayra Benavides Villafranca, se abstuvieron de votar.

Al dar lectura al dictamen el diputado local Isidro Vargas Fernández estableció que la reforma era necesaria “a fin de tener un poder legislativo autónomo en sus decisiones”.

Explicó que al modificar el artículo 65, se regresa la flexibilidad que debe tener el Congreso del Estado para cambiar la constitución sin tener que contar con la aprobación de los cabildos locales, “ya que la voluntad de este Congreso se ve perjudicada por estar supeditada a la opinión de los entes municipales”.

Vargas Fernández dijo que para que el Congreso cumpla con eficacia sus funciones reformadoras se hizo necesario reformar el artículo 65 en su primer párrafo para que las modificaciones a la constitución estatal sean aprobadas por dos tercios de los diputados locales.

Ante ello el legislador pidió al pleno “derogar el segundo párrafo de este artículo para que este poder legislativo recupere su autonomía porque el pueblo de Tamaulipas es al que representamos y al que nos debemos”.