Dr. Adán W. Echeverría-García

Cuatro casos, entre los múltiples que ha liderado, son los que pueden comentarse, puesto que han llegado a la violencia física. Primero, todo México fue testigo de que las huestes lideradas, y pagadas —puesto que los trabajadores del poder judicial están en paro, aunque siguen cobrando puntualmente sus quincenas— por el Poder Judicial, cuya máxima representante es Norma Lucía Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de México, que invadieron las instalaciones del Senado de la República para impedir la votación de la Reforma, vandalizando mobiliario, puertas, y golpeando a los trabajadores de ese recinto.

El segundo acto ha sido la agresión a un periodista que cubría la manifestación de los trabajadores del Poder Judicial, fue agredido a golpes con el palo de una bandera por una mujer que le gritaba: “Tú eres de ellos, eres de ellos, lárgate”.

El tercer y cuarto acto ocurrieron el pasado fin de semana. El viernes 20 de septiembre, en una sala privada del aeropuerto de la Ciudad de México, un abogado de intereses empresariales internacionales empujó en tres ocasiones, arrebató el teléfono y borró el video que grababa el senador Gerardo Fernández Noroña, quien actualmente funge como presidente del Senado. Al ser increpado por un ciudadano que comenzó a insultarlo, y a acercársele demasiado, y al no presentarse guardias en la sala del aeropuerto, el senador decidió grabar la agresión y avisarle al sujeto que lo grabaría, entonces el ciudadano abogado comenzó a empujarlo, hasta en tres ocasiones, para luego arrebatarle el dispositivo móvil y borrar el vídeo que se grababa.

El cuarto acto ocurrió ya en el fin de semana, en el Puerto de Veracruz, un pequeño grupo de trabajadores del Poder Judicial se juntaron para gritarle a Andrés, todavía presidente de México, y un individuo decide lanzarle una botella de agua que cruzó muy cerca de donde caminaba el presidente, quien logró evitar el golpe. El individuo que lanzó la botella ha sido identificado en redes sociales, y se le ha ubicado entre el grupo de violentadores que ingresaron agresivos al Senado de la República por órdenes de Norma Lucía Piña.

A pesar de todo lo anterior, los Comenta Noticias de México de las grandes empresas de medios de comunicación, esas que litigan todos los días por no pagar impuestos, hicieron mofa de los ataques, continúan con su campaña de incitación al odio: voces que llaman Bellaco a uno, también llaman a linchar a senadores de Morena, PT y Partido Verde, quienes votaron a favor la Reforma al Poder Judicial, y los medios de comunicación impresos, bajo las firmantes plumas de los mismos Comenta Noticias, cierran el sexenio cargados de odio, y claman porque la violencia en México se desborde, claman y piden por sangre, y normalizan los ataques físicos que contra personalidades del gobierno de México están ocurriendo. Llegan al grado de señalar en radio y televisión: “Muy bien por el abogado que increpó a Fernández Noroña, es un héroe, y a Noroña un consejo le doy: No vayas a esas salas del aeropuerto, ahí no está la raza a la que perteneces”; sentencias cargadas de clasismo, racismo, que incitan al odio.

¿En qué momento Norma Lucía Piña se hará responsable de toda la violencia que sus actos ilegales están provocando en el país? ¿Defender los privilegios de que ha gozado esa élite corrupta en verdad que vale toda la mugre que ahora están sacando? Usted, querido lector, qué opinión le merecen estos ataques físicos sobre el presidente de México.

Esta es la última columna que escribo en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, la siguiente columna, la que se publicará la próxima semana ya será en un nuevo gobierno, el de la primera mujer presidenta de México: Claudia Sheinbaum Pardo. La libertad de expresión se conserva intacta.