CUADRANTE   POLÍTICO…

POR:  FERNANDO   ACUÑA  PIÑEIRO.-

 

   Aun recuerdo aquellas porras de oro  en los dedos anulares  de los caciques cetemistas tamaulipecos. Se vivía la decada de los ochentas. Y   nuestro estado registraba una época  de feudos gangsteriles, dueños de inmensas fortunas y con  una curul asegurada en los  Congresos  locales  y federales.

     La llegada  de Carlos  Salinas  de Gortari, (el jefe máximo del neoliberalismo) a la presidencia  de la república, provocó  la caída  y el desmantelamiento  de los bunkers corporativistas, que hasta ese entonces le habían servido al PRI para mantenerse en el poder, pero que a partir  del salinato,  ya no representarían gran cosa.

  Todos esos personajes  de horca y cuchillo que llegaron a tener un gran peso, en las  decisiones  políticas partidistas y gubernamentales, fueron  arrojados al basurero de la historia. El nuevo régimen neoliberal,  ya no requería de ellos. (Pero el objetivo del salinato, no era la democratización gremial, sino despojar  a los sindicatos del poder, para entregárselo a la oligarquía empresarial. Y así sucedió).

     Algunos, como “La “Quina”, fueron encarcelados. Otros como  Carlos  Jongitud Barrios, en el SNTE fueron simplemente cesados, y relevados  por piezas igual de corruptas. Por esa puerta de la decadencia renovada, ingresó Elba Esther Gordillo.

 La reestructuración de los liderazgos sindicales que fue operada desde el sexenio salinista, le restó fuerza contestataria al sindicalismo charro  y prácticamente lo  desapareció de la escena económica en México. Su lugar fue ocupado  por  un nuevo concepto de sindicatos blancos, supeditados totalmente  al poder empresarial.

  De esta manera, los empresarios, pasaron de ser los capitalistas que  negociaban con los sindicatos, a  la absorción misma de un sindicalismo, que ya en los tiempos de  Vicente  Fox, se observaba dolorosamente anulado. El colmo de esa época fue que, un ex lider de la COPARMEX, como  Carlos Abascal,  se erigió  como Secretario del Trabajo. La iglesia en manos de Lutero. El rebaño obrero, absolutamente sometido, por los dueños del capital.

  Los últimos tres sexenios del PRI, De la Madrid, Salinas y Zedillo, y los dos del PAN: Fox  y Calderón, fueron el escenario de una terrible debacle, para los trabajadores. Mientras el país crecía, en cifras macroeconomicas y en inversiones oropelescas que constituían el motivo para  el festejo  gubernamental, las clases asalariadas, recibían incrementos  risibles, de un peso o de dos pesos.

 Mientras tanto, las élites  de la alta burocracia, y las cúpulas sindicales ganaban  salarios  principescos. Diputados, senadores, gobernadores  y Presidentes  de la República, conformaban  el  México  de la abundancia, el México bonito.

 Del otro lado,  las clases medias erosionadas  y  la clase trabajadora, siguieron pagando tributo a un país, que  se ufanaba de contar con familias multimillonarias en dólares. Así surgieron los clanes de Forbes, corporativos  que sugerían un galopante progreso y abundancia, pero que no podían ocultar  las graves contradicciones, de la grosera opulencia,  en un país de jodidos.

  Hoy,  con la reciente reforma laboral, aprobada por el Congreso federal obradorista,  la democracia sindical sin duda que, repercutirá  profundamente en una cultura asalariada, donde  los obreros  volverán  a recuperar  un papel mas activo y de actores de primer orden. Y  dejarán atrás  los tiempos en que, se les trataba,  con la bota del sometimiento.

  Lo que viene a imprimir  una   saludable oxigenación al sindicalismo mexicano,  es  el cambio de los antiguos métodos caciquiles para elegir a las nuevas dirigencias. Antes, una elección de este tipo, se realizaba,  mostrando credenciales y con un vigilante de la cúpula sindical, solicitando  las identificaciones  de cada uno.

Para que no haya coerción de ninguna especie. Los  liderazgos  corporativos, ya no podrán  forzar  el voto, por la vía de las dádivas o de las amenazas.

  Habrá que ver, como evoluciona  esta nueva cultura democrática, en sindicatos preponderantes, como es el caso del sindicato petrolero, usurpado y  controlado  por la familia  de Carlos Romero Deschamps. O en el mismo SNTE, donde Elba Esther Gordillo, amenaza con volver a controlar  a este  gremio, considerado entre los  más  numerosos  de  América  Latina.

  Adornada por una serie de virtudes de carácter ético y democrático, la Reforma  laboral, enfrenta dos duras pruebas: la permanencia e impunidad de Romero Deschamps, y el grotesco retorno de la profesora Gordillo.

 Si, en estos dos campos, no se producen cambios profundos, se dará por hecho que la reforma laboral, en términos de pragmatismo rampante, no es otra cosa que, un nuevo capítulo del trillado y recurrente gatopardismo:

 Cambiar, para seguir iguales.

——-MORENA Y LA CAMINATA DE LA ESPERANZA-

  La candidata de MORENA por el 14 Distrito, Nora  de los Reyes encabezó el domingo,  una multitudinaria caminata ciudadana, por el paseo  Libre  diecisiete.  Se calcula que fueron miles  de personas  las que acudieron a su llamado, para  realizar  una caminata por la esperanza.

 El evento tuvo un fuerte  impacto político, en la percepción social de los electores tamaulipecos.

——EN CHINO, EL TEMA DEL FISCAL ELECTORAL EN EL ESTADO–

 La elección  por el Congreso local en Tamaulipas, se perfila con visos de judicialización , y  un signo  que acumula la tensión política, es que los partidos  no se ponen  de acuerdo en la designación de  un Fiscal  electoral. Se requiere de un funcionario, capaz en lo profesional, pero sobre todo probo y con independencia de las fuerzas que se disputan el poder. ¿Dónde encontrarlo?