Entre Nos…
Por: Carlos Santamaría Ochoa.-
Cambio de hábitos
Con la llegada de la primavera y los calores propios de nuestra entidad, deben venir los cambios obligados de costumbres y muchas cosas más: se requiere adaptarnos a las condiciones climáticas, toda vez que hemos hecho del pobre clima un aspecto inseguro, cambiante y radicalmente peligroso.
Si bien es cierto que aun nos faltan días fríos, con esos cambios drásticos que tienen como resultante una serie de conflictos de salud en cuanto a aspectos respiratorios y bronquiales, ya se dejan sentir los calores y nos preparan a casi todos, lo que nos lleva a escuchar la frase típica “apenas estamos en marzo, imagina como estaremos en julio”, que muchos pronuncian con desesperanza y miedo a lo que vendrá, gracias a que hemos roto el equilibrio ecológico en el planeta, y por más mensajes de organizaciones no gubernamentales, no hacemos el caso necesario, provocando lo que hoy padecemos.
En ese sentido, la Secretaría de Salud en Tamaulipas, mediante sus ejércitos de promotores que dirige el doctor Alejandro García Barrientos, en su calidad de subsecretario de prevención y promoción de la salud, hacen propias las instrucciones de la secretaria Gloria de Jesús Molina, en cuanto a ir capacitando a todos los que les sea posible para que tomemos las precauciones necesarias, sobre todo, que no juguemos al “interesante” con el sol, el astro rey que tan benéfico es y tan peligroso a la vez.
Los cuadros de gente asoleándose en las playas: dormidos, tendidos plácidamente se han convertido, según reconoce García Barrientos, en un marco de peligrosos problemas de la piel que van desde quemaduras de primer grado hasta cáncer, por lo que tenemos que hacer una serie de acciones que nos permitan evitar males mayores.
Ya no estamos para tirarnos a broncear: la cosa ha cambiado.
Ahora tenemos que ir buscando ofertas de bloqueadores para la piel que, regularmente son costosos, y que tendremos que emplear si queremos acudir a esas maravillosas playas con que cuenta Tamaulipas, y a donde se congregan miles de turistas de muchos sitios del país y el extranjero, gracias a la riqueza de sus aguas que es muy bien cotizada por los paseantes y por los amantes de la naturaleza.
Dice García Barrientos que debemos considerar lugares en los que podamos aprovechar sin estar mucho tiempo expuestos al sol, y en caso de ir a las playas, considerar la posibilidad de llevar sombrillas, paraguas, tiendas de campaña y lo que sea necesario para poder cubrirnos en la medida de lo posible, sin perder de vista que los rayos ultravioletas del sol siguen participando en una acción de deterioro de la piel, de ahí la necesidad de los bloqueadores.
En el equipo de trabajo del doctor García Barrientos existen un número muy considerable de promotores de la salud que pueden apoyarnos con consejos para poder disfrutar mejore nuestros días de asueto y no tener que sufrir las consecuencias. Recordamos aquellos días cuando en la infancia acudíamos a la playa sin más protección que la bendición de la abuela, y por la noche, llorando esperábamos el turno para que nos llenaran la espalda y hombros de la famosa pomada Vitacilina como único escudo para poder seguir divirtiéndonos.
Hoy el sol es otro: los campos o capas que protegían a la piel un poco han desaparecido y tenemos que estas conscientes del deterioro que enfrentamos y la forma en que debemos acatar las disposiciones de los expertos en salud.
Para García Barrientos, una Semana Santa positiva será la que tengamos registro de cero personas atendidas, en el aspecto y sentido de que hubo tato cuidado que no se hizo necesario el aplicar primeros auxilios.
Sabemos que eso no sucederá, así que hay que tomar providencias.
La gente que sabe y las recomendaciones ahí están, solo es cuestión de que las tomemos y analicemos, las entendamos y practiquemos sobre todo con los nuestros, porque no debemos olvidar que los principales responsables de la salud de los hijos somos los padres. Hoy y siempre.
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