● Una posada en La Pedrera reunió a más de 2 mil 500 personas y derivó en el
compromiso de entregar cinco toneladas de pollo a familias vulnerables, como
un gesto de gratitud y solidaridad impulsado por liderazgos locales y federal
en el marco de la Navidad.

Por Agustin Peña Cruz | NoticiasPC.com.mx |
Ciudad Altamira, Tamps.- Ante la presencia de más de dos mil quinientas personas
reunidas en el sector La Pedrera, en Altamira, la posada navideña encabezada por el
regidor Félix Guillú Meraz trascendió el carácter festivo para convertirse en un acto de
contenido social y político, marcado por un mensaje de esperanza, gratitud y compromiso
comunitario.
Cabe precisar que el encuentro, que congregó a militantes y simpatizantes, se desarrolló en
un ambiente de cercanía y reflexión colectiva, en el que la Navidad fue asumida no solo
como una tradición cultural, sino como un punto de partida para acciones concretas en favor
de quienes enfrentan mayores carencias.
Desde el templete, Guillú Meraz sostuvo un discurso profundamente reflexivo, en el que
vinculó el sentido del nacimiento del Niño Jesús con la realidad social que atraviesan
muchas comunidades de Altamira. Resaltó que la fe y la esperanza no deben entenderse
como conceptos abstractos, sino como fuerzas éticas que impulsan la reconstrucción del
tejido social. Al recordar que “los tiempos de Dios son perfectos”, el regidor enfatizó que
incluso en contextos de incertidumbre existen oportunidades para avanzar, reconciliarse y
fortalecer la unidad comunitaria. En ese mismo tono, sostuvo que gobernar implica servir y
ejercer un liderazgo con convicción moral, especialmente hacia quienes no tienen voz, pero
sí dignidad.
La presencia del diputado federal César Augusto Verástegui Ostos, conocido como “El
Truko”, fue destacada por el anfitrión como una muestra de cercanía y humanidad, más allá
del protocolo político. Guillú Meraz agradeció públicamente su acompañamiento, señalando
que su asistencia representaba un respaldo tangible a un sector históricamente vulnerable,
donde la solidaridad se vuelve un recurso esencial frente a la desigualdad. El regidor dijo
que la Navidad se traduzca en acciones reales, capaces de transformar la vida cotidiana de
las familias altamirenses, bajo la premisa de que “con fe todo es posible”.
Por otra parte, Verástegui Ostos al tomar la palabra expresó su agradecimiento por la
invitación y para reconocer el respaldo que, dijo, ha recibido a lo largo de los años por parte
de la militancia y la comunidad. Con un tono cercano y espontáneo, el legislador federal
enmarcó su intervención en el espíritu de reflexión propio del mes decembrino y planteó una
iniciativa concreta: la organización de una colecta de pollo destinada a familias de escasos

recursos, con una acción de correspondencia y gratitud hacia la comunidad que ha
acompañado su trayectoria política.
El diputado explicó que la propuesta consistía en reunir al menos cinco toneladas de pollo,
con la participación de diversos liderazgos presentes, entre ellos el propio Félix Guillú
Meraz, Cuauhtémoc Zaleta, Julio Flores, Silvia Guadalupe García, Jesús Zeferino Lee y
otros invitados, cada uno comprometiéndose a aportar una tonelada. La meta, detalló, es
distribuir aproximadamente tres kilogramos de pollo a más de dos mil quinientas familias, lo
que permitiría que muchas de ellas cuenten con un alimento básico para la preparación de
la cena de Nochebuena. “Quizá no les resuelve la vida, pero para muchas familias es la
oportunidad de hacer tamales o compartir la mesa”, señaló.
La distribución quedó programada para el día domingo 21 de diciembre, a las 9 de la
mañana, en el mismo punto de reunión, como un acto que antecede al cierre del año y que
busca reforzar el sentido de comunidad.
Verástegui Ostos precisó que, aunque su agenda lo obligaría a acudir solo de manera
breve, el compromiso colectivo permanecería como una muestra de que la política también
puede expresarse en acciones solidarias. En sus palabras finales, agradeció a Dios, a los
presentes y a quienes, desde distintas responsabilidades, decidieron aportar “un poquito de
lo que Dios nos ha brindado”, deseando a las familias una Navidad en paz y un año nuevo
con proyectos renovados rumbo a 2026.
Durante el evento, la presidenta del Comité Directivo Municipal, Silvia Guadalupe García
Escobedo, intervino con un mensaje breve pero significativo, en el que agradeció al regidor
Félix Guillú Meraz por las facilidades y la organización de una posada “hecha y pensada
para ustedes”, así como la presencia del diputado federal, a quien calificó como un amigo
cercano de la militancia.
García Escobedo precisó la importancia de la unidad y la continuidad del proyecto político,
expresando el deseo de que el próximo año encuentre a la comunidad más cohesionada y
comprometida.
La velada concluyó entre muestras de convivencia, agradecimientos y el compromiso
explícito de llevar a cabo la entrega de apoyos alimentarios, además de la responsabilidad
social y corresponsabilidad política. En La Pedrera, la posada se convirtió así en un espacio
donde la fe, la política y la acción comunitaria confluyeron en un mismo propósito: no dejar a
nadie atrás.
Asistieron al evento: Samuel López Cepeda, secretario general del PAN Altamira; Julio
Flores; Nancy Ruiz, regidora del PAN en el cabildo de Altamira; Alva Verástegui, regidora
del PAN en Ciudad Madero; Óscar Morado, regidor del PAN en Ciudad Madero; Jesús
Zeferino Lee; Cuauhtémoc Zaleta; Pedro Zaleta; Néstor Puente; Rosa Narcedalia Castro;
Leobardo Violante, entre otros.