Por: José Medina
Ciudad Victoria.— El diputado de Morena en Ciudad Madero Francisco Adrián Cruz Martínez propuso adicionar el artículo 35 Bis a la Ley de Turismo del Estado de Tamaulipas, con el propósito de establecer un distintivo estatal de buenas prácticas ambientales dirigido a municipios que cuenten con vocación turística.
Reiteró que ese distintivo tendrá carácter honorífico y se otorgará a aquellos municipios que implementen acciones verificables de protección ambiental en sus zonas turísticas, contribuyendo así a la sostenibilidad del sector sin generar cargas presupuestales.
«El turismo sostenible no es un estado estático, sino un camino de mejora continua por el que hay que avanzar hasta cumplir con los objetivos ambiciosos y transformadores de la Agenda 2030 y, donde sea posible, superarlos. Para ello, se deben generar las herramientas y procesos que permitan allanar el tránsito hacia la sostenibilidad en todas las áreas de acción del destino. La posibilidad de contar con indicadores y con metas específicas permite tener un parámetro de medición y verificación en el tiempo, importante para los tomadores de decisiones y para la planificación de políticas públicas».
Reiteró que el impacto normativo de esta iniciativa es positivo, ya que se adiciona un artículo sin modificar disposiciones existentes, lo que garantiza su viabilidad jurídica y armonización interinstitucional. En términos presupuestales, el costo fiscal es nulo, dado que el distintivo no implica transferencias, subsidios ni creación de programas, y su implementación se basa en capacidades existentes de evaluación y difusión. Desde el punto de vista social y ambiental, el reconocimiento incentiva la mejora continua promueve entornos más limpios y seguros para la ciudadanía, mejora la competitividad turística del estado y fomenta la conservación desde el ámbito local.
«En conclusión, esta iniciativa representa una oportunidad para posicionar a Tamaulipas como referente en turismo responsable, generando un círculo virtuoso de mejora ambiental, reputación positiva y compromiso ciudadano. Al reconocer el esfuerzo ambiental de los municipios, se promueve una gobernanza moderna basada en Ia participación, la transparencia y la sostenibilidad, sin comprometer los principios de austeridad ni generar cargas presupuestales».