LOS HECHOS
POR José Inés Figueroa Vitela

Hay quienes ven el brinco de la primera mitad del sexenio estatal, como el
principio del fin.
Son quienes ya andan preocupados y algunos hasta ocupados, bordando en futuros
trasnochados, perdidos en los apetitos que de insaciables, resultan insatisfechos, con
un fin indeterminado.
Están buscando cómo brincar al siguiente tramo gubernamental, cuando no tienen
la seguridad de terminar bien la actual administración; más bien, están actuando en
contrario, abonando a un lastimoso cierre personal y en algún momento de grupo.
Nada que reclamarles en las constantes de la pobre condición humana.
Si acaso algo haya que decirles, es que volteen al pasado, para que conozcan lo que
les depara el destino, encontrando las afinidades de otros personajes que actuaron
como ellos, precipitando su caída a los ojos de la opinión pública.
Nunca fue buena la consecuencia.
Ahora nos encontramos en la plenitud del sexenio, como para capitalizar el
conocimiento, la experiencia, la fortaleza que da el tome de las riendas, que no se
conocían y las que escamotearon terceros, aprovechándose de coyunturas.
Adelantar el proceso sucesional significa la renuncia del derecho a ejercer el tiempo
propio, en todos los círculos y estratos del poder público actuante y esa, es una
oportunidad única… irrepetible.
Eventualmente, alguien se quedará, pero por derecho natural, la mayoría de los
actores protagónicos de la administración sexenal, tienen ahora, como han tenido
siempre, cada cual en su momento, la oportunidad de trascender.
Siempre será por lo que están haciendo ahora, pero cumplido su tiempo, tendrán
que irse a otros derroteros, disfrutando o nó la fama que en los hechos construyeron
cuando tuvieron la oportunidad.
Así lo hemos visto, como medios, al paso de los sexenios y así lo seguiremos
viendo, seguramente, mientras permanezcamos en este tramo de espacio y tiempo.
Hoy el vaso no está medio vacío; está medio lleno y ha de llenarse más, tanto como
todo lo que se pueda y se quiera hacer en los siguientes tres años para los que fue

electo el doctor AMÉRICO VILLARREAL ANAYA.
Del recuento a la mitad del camino, protagonizado la semana pasada en un entorno
de aprecio y reconocimiento, los ecos siguen retumbando en los confines de la
geografía estatal y más allá de las fronteras del territorio propio.
Allende El Bravo, y en el centro de la geopolítica nacional, sigue comentándose la
visita de los Congresistas norteamericanos, que respondieron a la invitación del
Ejecutivo tamaulipeco, para estar presentes en la exposición del recuento de su
primera mitad de gobierno.
En suelo nacional, solo la Presidenta CLAUDIA SHEINBAUM ha tenido esa
deferencia de compartir y coincidir con legisladores extranjeros; claro, los
diplomáticos, en el exterior tienen tal potestad de eventual ejercicio ordinario.
Otro tema para presumir en Tamaulipas, es la calificación sobresaliente obtenida
por el Presidente del Congreso Local, HUMBERTO ARMANDO PRIETO
HERRERA, quien apareció en el primer lugar, dentro de la medición anual que hace
la revista especializada CongresistasMex.
El legislador de Reynosa, se ha distinguido por la calidad de sus propuestas y por la
presencia en el territorio, escuchando y canalizando las aspiraciones y demandas de
sus representados, en un contacto permanente de diálogo y apertura.
Esas particularidades, propias en el abanico de responsabilidades de todos los
legisladores, se magnifican en el ejercicio de su liderazgo en la conducción de la
Cámara tamaulipeca.
La semana pasada, al poner en marcha el periodo ordinario de sesiones, la diputada
EVA REYES, en su calidad de Presidenta de la mesa, electa para el periodo que va de
aquí a diciembre, valoró los alcances de tal liderazgo.
Armonía, puntos de encuentro, coincidencias en los objetivos superiores del estado,
asociados al interés ciudadano, dimensionan los alcances de la gestión de PRIETO
HERRERA, justamente valorados por los ciudadanos consultados y los especialistas
de la calificadora recién publicados.
La coorddinación entre los tres poderes, reivindicada en la elección del nuevo
Poder Judicial, es otra fórmula que fajó el liderazgo del doctor AMÉRICO
VILLARREAL ANAYA seguirá abonando en beneficio del pueblo.
Veremos y diremos.