La Comuna
José Ángel Solorio Martínez
Con un 74 por ciento de aprobación, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, termina su primer año de gobierno. Y con el mayor poder, que la Izquierda haya tenido en su historia. Andrés Manuel López Obrador, fue un presidente con una autoridad mayúscula por su apoyo popular generado por una votación sin precedente; pero tuvo, una oposición incómoda: la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
En ese escenario, AMLO se movió con habilidad para instrumentar sus políticas y concretarlas.
Una parte fundamental de su estrategia fue la Reforma judicial; conocía a la elitista SCJN y el problema que le heredaría a Sheinbaum, si no cambiaba las dinámicas de administrar la Justicia en el país.
Justo eso, es lo que hoy blinda a la IV T y su Segundo Piso: la nueva SCJN.
En muchos países de Latinoamérica, la Izquierda ha sido exitosa. Argentina, Brasil, Uruguay, Colombia, Chile, Venezuela, Guatemala y Nicaragua, han sido gobernados por estadistas progresistas. En algunos casos ha sido la corrupción quien ha colapsado sus proyectos; otras la falta de profundidad de sus programas.
¿Cuál es la diferencia de esos países y México?
1.- Trasladar al mundo real, los discursos antineoliberales. En tanto algunas naciones, se enfrentaron al imperio del norte, con las armas de la retórica -Venezuela y Colombia, en estos momentos- AMLO, lo confrontó con prácticas de gobierno. Aumentó salarios, canceló los créditos -nuestro gobierno encabezado por AMLO, fue el único país del mundo que no pidió préstamos para combatir los duros efectos de la pandemia del COVID-, controló la inflación y recuperó para la nación los energéticos.
2.- Integrar en la Constitución los derechos sociales de los mexicanos. Los apoyos a adultos mayores, a minorías étnicas, estudiantes, etc., se elevaron a rango constitucional. ¿Existe algo más semejante que esto, a una revolución social?
3.- La vecindad con USA. Lejos de adoptar un discurso entreguista del neoliberalismo, o del propagandismo verbal, la IV T, inició una nueva y más efectiva narrativa: la Soberanía y la Independencia, como eje de acción en un mundo cada vez más claramente multipolar. No se subordina a los bloques; pero tampoco se distancia.
Claudia recibió el país con excelentes cimientos. La IV T dejó a su Segundo Piso una pista de despegue formidable.
Sin la SCJN de antaño que operó como verdadero obstructor de las políticas progresistas, el gobierno de Sheinbaum sólo tendrá en el frente a una oposición atomizada y sin ideas.
La nueva legalidad está naciendo.
El poder presidencial, se consolida.
MORENA en ese universo creado por los ciudadanos, se ve pequeño.
Los factores en el Poder legislativo lo mismo.
La presidenta en un año logró lo que se creía difícil: tomar las riendas del país.