Columna Opinión Política.
Dr. Jorge A. Lera Mejía.
Segunda Parte: «Gobernanza y Gobernabilidad en México: La gobernabilidad en nuestro país bajo Morena y Claudia Sheinbaum. Centralización del Poder: Un Nuevo Hegemón Político».
INTRODUCCIÓN:
Las recientes escisiones políticas del Segundo Piso de la 4T, ha logrado implosionar la relación de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, con los herederos de AMLO incrustados en su gobierno. Particularmente, con la reciente acusación del otrora Jefe de Seguridad del gobierno de Adán Augusto López, que anticipa la posible caída de su encargo dentro del Senado de la República. Asimismo, las declaraciones del Representante de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, anticipa su retiro «voluntario» de tal Comisión dejando a la presidenta la libertad de nombrar sus alfiles de confianza ante la delicada coordinación Política del Congreso de la Unión.
Finalmente, la debacle sufrida en la Casa de Bolsa «Vector» del ex Jefe de la Oficina de la Presidencia de AMLO, Alfonso Romo, deja al descubierto un entramado político y económico del gobierno de López Obrador, que lo debilita en sus entrañas por manejar corrupción e involucramiento con criminales en redes de lavado de dinero relacionado con las drogas y el fentanilo.
ESCENARIO COMPLEJO ACTUAL:
La viabilidad y cohesión del “segundo piso” de la 4T bajo Claudia Sheinbaum enfrenta serias amenazas derivadas de los escándalos de corrupción asociados al círculo cercano de Andrés Manuel López Obrador (AMLO)—incluidos Adán Augusto López, Ricardo Monreal y Alfonso Romo—, así como de la profunda desconfianza generada por la presunta colusión con el crimen organizado y el involucramiento de las fuerzas armadas.
Corrupción y excolaboradores de AMLO
Alfonso Romo, exjefe de gabinete de AMLO, ha sido implicado en investigaciones del Departamento del Tesoro de EE.UU., cuya OFAC sancionó a su empresa Vector Casa de Bolsa por presunto lavado de dinero proveniente de actividades de cárteles como el de Sinaloa y el CJNG. Esto revela la cercanía de intereses entre el poder político de la 4T y redes ilícitas.
Adán Augusto López y Ricardo Monreal también han sido vinculados a redes de corrupción y a contratos de obras emblemáticas que involucran presuntas irregularidades y favorecimientos. Estas conexiones han mermado la credibilidad discursiva del combate a la corrupción y generado desunión interna en Morena.
Relación con crimen organizado y fuerzas armadas
Diversos reportes periodísticos y denuncias en EE.UU. han señalado que financiamientos ilegales provenientes de cárteles—como el de Sinaloa, del Noreste y del Golfo—habrían fortalecido campañas locales y estatales de Morena en años recientes, así como sobornos que facilitaron la llegada de aliados al poder. Las acusaciones apuntan a una “relación simbiótica”, en la que dinero sucio se intercambia por protección o acceso a contratos y recursos públicos.
La participación creciente de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública no ha reducido la violencia ni la penetración del crimen organizado, y múltiples informes señalan la corrupción dentro de cuerpos militares y policiales. A pesar del aumento de efectivos (más de 230,000 militares en 2024), los delitos y homicidios siguen en niveles críticos. El uso militar para tareas civiles también ha sido terreno fértil para escándalos y violaciones de derechos.
Presión y freno desde EE.UU.
La administración estadounidense ha intensificado la presión contra el gobierno mexicano —ahora encabezado por Sheinbaum— bajo la amenaza de imponer aranceles y de intervenir directamente ante la ineficacia en el combate a cárteles, calificados oficialmente como “organizaciones terroristas” por EE.UU. El Pentágono ha emitido advertencias de posibles acciones militares unilaterales si no se logran detenciones clave o un desmantelamiento visible de redes criminales vinculadas a funcionarios o exfuncionarios de alto nivel.
Como respuesta, México ha acelerado la entrega de capos y ha incrementado espectáculos de fuerza, pero la exigencia estadounidense es explícita: entrega de “cabezas políticas” involucradas o el riesgo de sanciones económicas y mayor intervención.
Impacto en el bloque de gobierno y el futuro de la 4T
Las acusaciones y la evidencia de corrupción han debilitado la legitimidad moral y política del bloque gobernante, alimentando divisiones internas y erosión de la unidad que era la fortaleza inicial del proyecto. La amenaza de que caigan figuras emblemáticas ahonda la desconfianza y la incertidumbre.
La presión de EE.UU. y el riesgo de sanciones han obligado al gobierno de Sheinbaum a replantear el manejo de sus cuadros y estrategias: negociar entregas, sacrificar figuras públicas e incluso reorientar alianzas para impedir crisis comerciales y de seguridad.
Esta dinámica genera un escenario frágil: si bien el “segundo piso” de la 4T busca profundizar reformas sociales, la permanencia de figuras marcadas por sospechas y la presión internacional debilitan la viabilidad de largo plazo y la cohesión interna dentro del bloque oficialista.
En síntesis, la corrupción endémica del círculo histórico de AMLO, los vínculos no desmentidos con cárteles y el involucramiento militarizado, aunados a la presión sin precedente desde EE.UU., representan los mayores riesgos para la estabilidad y continuidad del proyecto 4T bajo Sheinbaum. El resultado será determinado por la capacidad (o voluntad) de romper con estas rutas de corrupción y responder eficazmente a las exigencias internas y externas.