Por: José Medina

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Marina Ramírez Andrade denunció que la situación con los productores de sorgo se ha vuelto totalmente insostenible, y que manda al borde del colapso a miles de familias que viven en el campo.

Señaló que el sorgo no es cualquier cultivo, es un grano fundamental para la alimentación animal y para la economía agrícola del país; «Cada que un plato de comida llega a nuestra mesa, una porción de carne, ya sea huevos también o carne de res, carne de cerdo, esos animales fueron engordados con alimento, y la base de ese alimento contiene el 80% de sorgo.

Tamaulipas ha sido históricamente el mayor productor de sorgo a nivel nacional años recientes, hemos llegado a sembrar hasta 767 mil hectáreas, lo que ha representado alrededor del 50% de toda la producción de México», acotó.

Y es que ese cultivo, no sólo genera alimento, como lo ha comentado también, empleo, actividad económica y arraigo en nuestras zonas rurales.

Afirmó que los productores enfrentan una realidad, muy dura en los últimos ciclos agrícolas, han tenido que sembrar en condiciones cada vez más difíciles.
Los precios del grano han caído tanto que ya no cubre ni siquiera los costos de producción, a esto hay que sumarle el aumento en el precio de los insumos, en los fertilizantes en el Diesel y semillas.

«El resultado es que muchísimos agricultores, están trabajando a pérdida, con deudas acumuladas, sin apoyo suficiente por parte del gobierno federal,
este año, muchos ni siquiera pudieron sembrar».

La diputada de oposición señaló que hasta 200 mil hectáreas se quedaron sin sembrar, y la razón es muy simple no les alcanzó el ciclo pasado, no les dejó lo suficiente para volver a intentarlo,
tuvieron que elegir entre pagar sus deudas o sembrar, y tristemente, en muchos de los casos no pudieron hacer ninguna de estas dos cosas.

Reiteró que si no se actúa ahora, el año que viene, será todavía peor, muchos productores, ya han dicho que no volverán a sembrar, y no porque no quieran, sino porque ya no pueden, porque se han quedado sin capital sin respaldo, y sin esperanzas.

Explicó la diputada de San Fernando que está situación no sólo afecta la siembra, cuando cae la producción de sorgo, también se tambalea la economía de todo el estado, se paraliza la actividad de los ejidos, bajan las ventas en las agrotiendas, se rompen las cadenas y sube los costos para quienes dependen del grano para alimentar el ganado, es decir, se encarece la carne, la leche, el huevo, y todo esto termina afectando directamente a nuestras familias Tamaulipecas.

«El abandono de sorgo, no sólo pone en riesgo la economía de Tamaulipas, sino que también compromete la seguridad alimentaria de nuestro país.

No podemos permitir que los productores abandonen sus tierras, por falta de apoyos, no podemos seguir viendo como año con año disminuye la superficie sembrada, y sólo observar como esto está sucediendo», finalizó.