A MI MANERA
Por Tello Montes
-Beto Granados, con resultados que no se maquillan.
-La UAT va un paso adelante en educación y salud mental.
Con una inversión histórica de 10 mil millones de pesos, la presidenta Claudia Sheinbaum refrenda su confianza en el gobierno de Américo Villarreal Anaya para resolver una de las crisis más urgentes de Tamaulipas: el agua.
La semana inició con buenas noticias.
Se firmó un convenio clave entre el director general de CONAGUA, Efraín Morales López, y el gobernador Américo Villarreal, para la tecnificación del Distrito de Riego 025 bajo Río Bravo.
No fue un acto protocolario más: se entregaron más de 388 millones de pesos para infraestructura hidroagrícola y se activó el compromiso de tecnificar el campo y garantizar el consumo humano.
Claudia Sheinbaum no improvisa. Su respaldo a Tamaulipas se basa en resultados concretos y una colaboración institucional que ha dado frutos.
En palabras del titular de CONAGUA, Américo es “un gobernador muy, muy activo en temas de agua”, y eso se refleja en el nivel de inversión gestionada: solo el Estado de México supera a Tamaulipas en presupuesto hídrico.
Además del impulso al riego agrícola, también se supervisó la construcción de la segunda línea del acueducto Vicente Guerrero-Victoria, proyecto prioritario para garantizar agua potable a la capital del estado.
Américo no solo pidió: gestionó, insistió y convenció.
Hoy, su gobierno ve recompensada su actitud colaborativa con recursos que cambiarán el futuro del campo tamaulipeco y la vida diaria de miles de familias.
Y como dice el dicho: “Cuando el río suena, es porque gestión lleva”.
BETO GRANADOS, CON RESULTADOS QUE NO SE MAQUILLAN
En tiempos donde muchos alcaldes viven de la propaganda y no del trabajo, Beto Granados, el presidente municipal de Matamoros, tiene con qué presumir, y no necesita decirlo él: lo dice la gente.
Según Demoscopia Digital, Beto es el alcalde fronterizo mejor evaluado de Tamaulipas, con un 57.6% de aprobación, y ese número no es obra de una encuesta comprada ni de redes infladas con bots.
Es producto de una gestión que ha sabido meterle mano —y cabeza— a temas tan sensibles como la seguridad, la educación y los servicios públicos, sin necesidad de excusas ni discursos huecos.
Y sí, la diferencia está en el estilo. Granados no gobierna desde el escritorio ni con filtros de Instagram, sino con botas en la calle, escuchando, atendiendo y resolviendo.
En un momento donde la política se llena de poses y simulaciones, en Matamoros hay un alcalde que responde con hechos.
La transparencia y la participación ciudadana no son solo palabras bonitas en su discurso: son herramientas vivas de gobierno. La cercanía con la gente no es para la foto, sino para entender en carne propia lo que duele y lo que urge.
Por eso no sorprende que, en un mar de mediocridad y abandono, Beto se haya convertido en un referente. Sus resultados no se maquillan, se notan. Y cuando eso pasa, el respaldo llega solo.
Como dice el dicho: “Al buen árbol se arrima el que sabe de sombra.” Y en Matamoros, ya saben quién da sombra, y quién solo promete ramas secas.
UAT VA UN PASO ADELANTE EN EDUCACIÓN Y SALUD MENTAL
La Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), en coordinación con la Secretaría de Educación del Estado, alista un proyecto pionero que podría cambiar la manera en que se atiende el éxito académico y la salud mental del estudiantado.
Se trata de una aplicación digital desarrollada por investigadores de la UAT, que permitirá evaluar de forma automatizada indicadores como inteligencia fluida, funciones ejecutivas, habilidades socioemocionales y estados emocionales, con el fin de detectar a tiempo factores de riesgo y tomar decisiones acertadas desde las instituciones.
Durante una reunión en el Campus Victoria, el rector Dámaso Anaya Alvarado y el titular de Educación, Miguel Ángel Valdez García, revisaron los avances de este modelo innovador que ya ha dado buenos resultados al interior de la UAT, identificando y atendiendo a estudiantes con ansiedad o dificultades de adaptación, mejorando su rendimiento académico.
El proyecto, encabezado por los maestros Adrián Andaverde y Néstor Meléndez, está listo para implementarse en el nivel medio superior, etapa clave para el desarrollo integral de los jóvenes tamaulipecos.
Porque si algo es cierto en educación, es que “más vale prevenir con datos que lamentar con diagnósticos tardíos.”
