• Empresarios de Reynosa exigen transición laboral gradual para proteger empleos.

Por Julio Manuel Loya Guzmán.
Reynosa, Tamaulipas.– La Cámara Nacional de Comercio, de Reynosa (CANACO) advirtió que una reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, sin medidas de acompañamiento para las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPyMES), podría afectar severamente al comercio formal, incentivar la informalidad y provocar pérdida de empleos.

El líder del organismo empresarial, Gildardo López Hinojosa, se sumó al llamado nacional de la CONCANACO SERVYTUR para construir una reforma laboral gradual, incluyente y realista, adaptada a las condiciones que enfrentan diariamente millones de negocios familiares en todo el país.

“El comercio, los servicios y el turismo generan 65 de cada 100 empleos formales en México. Estos sectores sostienen la economía local en ciudades como Reynosa, con márgenes operativos muy reducidos y jornadas extendidas. Una modificación abrupta pondría en riesgo esta estructura”, advirtió.

Actualmente, el 55% de la población ocupada en México trabaja en la informalidad, y una medida mal implementada podría agravar esta situación.

Según la Encuesta Nacional “Jornada Laboral 2025” realizada por CONCANACO SERVYTUR:

  • El 64% de las personas dueñas de negocios considera inviable una reducción inmediata sin afectar su operación.
  • El 71.4% anticipa un aumento en los costos operativos, incluso si la transición fuera paulatina.
  • El 58.85% reporta dificultades para cubrir turnos o mantener el nivel de servicio actual.

Entre las principales preocupaciones destacan el aumento de cargas fiscales y laborales, la afectación a la atención al cliente y el riesgo de despidos ante la incapacidad operativa.

PROPUESTA DEL SECTOR EMPRESARIAL.
CANACO Reynosa respaldó una propuesta basada en tres ejes:
*Transición gradual y diferenciada por sector, con una ruta hacia 2030 y adaptaciones según el tamaño del negocio, su giro y ubicación.
*Incentivos a la formalidad, mediante financiamiento, apoyos fiscales y digitalización, así como esquemas realistas para regularizar a pequeños empleadores.
*Creación de un Observatorio de Transición Laboral, con participación del gobierno, trabajadores y sector privado para evaluar impactos y realizar ajustes oportunos.

“No estamos en contra del cambio. Estamos a favor de que funcione. Y para eso necesitamos una reforma que escuche y respete la realidad de los negocios familiares. No se puede legislar con un solo modelo para todo el país”, subrayó López Hinojosa.

Finalmente, CANACO Reynosa exhortó al Congreso de la Unión y al Gobierno Federal a escuchar al sector productivo y diseñar una reforma que eleve la calidad de vida de los trabajadores sin desproteger a quienes generan el empleo.