Columna Opinión Económica y Financiera.

Dr. Jorge A. Lera Mejía.

En los últimos años, investigadores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) han realizado una labor destacada en el análisis de la migración, el tráfico de personas, las remesas y la compleja problemática de los movimientos humanos en México y la frontera norte. Estos trabajos han permitido comprender mejor las causas, dinámicas y consecuencias de estos fenómenos, así como el papel crucial de la UAT en la generación de conocimiento para la toma de decisiones y la formulación de políticas públicas.

Las investigaciones recientes han destacado cómo la migración centroamericana hacia Estados Unidos ha adoptado nuevas modalidades, como las «caravanas», en respuesta a la intensificación de los controles fronterizos y la militarización de la frontera mexicana. Este fenómeno, denominado “caravanización”, ha alterado las economías del tráfico humano, pues al migrar en grupo, los migrantes logran reducir su dependencia de los traficantes o “polleros”, lo que afecta directamente los ingresos de estas redes ilícitas. Sin embargo, los traficantes han adaptado sus estrategias, apropiándose del tiempo y trabajo de los migrantes y diversificando sus actividades, desde el cruce clandestino hasta la explotación laboral y sexual, especialmente de mujeres y menores.

El endurecimiento de la política migratoria estadounidense del gobierno de Donald Trump ha tenido consecuencias dramáticas, empujando a los migrantes a rutas cada vez más peligrosas y elevando el riesgo de muerte y victimización. Investigaciones han documentado la evolución de los “polleros” de actores locales y familiares a integrantes de redes de delincuencia organizada, en complicidad con autoridades de ambos lados de la frontera. El tráfico de personas se ha consolidado como una actividad criminal compleja, con la existencia de más de 90 organizaciones dedicadas a este delito en México, responsables de cientos de muertes y desapariciones de migrantes cada año.

El estudio de las remesas, otro eje central de la investigación universitaria, ha mostrado cómo los flujos de dinero enviados por migrantes mexicanos desde Estados Unidos han crecido exponencialmente en las últimas décadas. A pesar de que acuerdos como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), hoy T-MEC no incluyeron un componente migratorio, la integración económica y el crecimiento estadounidense impulsaron el aumento de las remesas, que llegaron a representar el 3.5% del PIB mexicano y se consolidaron como la segunda fuente de divisas del país. Sin embargo, la crisis financiera de 2008 y las recesiones en Estados Unidos han impactado negativamente estos flujos, evidenciando la vulnerabilidad de las familias mexicanas que dependen de este ingreso.

Los trabajos académicos también han abordado las causas estructurales de la migración, como la desigualdad económica, la falta de oportunidades y la violencia, así como las consecuencias de las políticas de control fronterizo, que han incentivado el tráfico de personas y la criminalización de los migrantes. Se ha documentado la existencia de “casas de seguridad” en ciudades fronterizas como Nuevo Laredo, donde los migrantes son retenidos, extorsionados o incluso secuestrados por traficantes, quienes cobran tarifas que pueden superar los 30 mil dólares en casos de migrantes de nacionalidades “exóticas”.

La Universidad Autónoma de Tamaulipas ha jugado un papel fundamental en la investigación de estos fenómenos, al generar conocimiento científico, formar recursos humanos especializados y contribuir al debate público sobre la migración y sus implicaciones. Los trabajos realizados han permitido identificar las causas profundas de la migración, los mecanismos de operación de las redes de tráfico de personas y el impacto social y económico de las remesas, aportando insumos valiosos para el diseño de políticas públicas más humanas y eficaces.

La UAT, a través de sus cuerpos académicos y comités de ética, ha garantizado la rigurosidad metodológica y el respeto a los derechos humanos en la investigación, posicionándose como un referente nacional en el estudio de los movimientos humanos. Su labor ha sido clave para visibilizar la complejidad del fenómeno migratorio, sus riesgos y oportunidades, y para proponer soluciones integrales que atiendan tanto las causas como los efectos de la migración en México y la frontera norte.

AVA Y MÉXICO TE ABRAZA:

Al continuar las amenazas de Trump de endurecer las deportaciones masivas de migrantes indocumentados hacia México, el gobierno estatal de Américo Villarreal Anaya sigue la aplicación del programa federal «México te Abraza».

Por lo anterior, el gobierno de Tamaulipas juega un papel central y coordinado para atender dichas amenazas de deportaciones masivas, especialmente a través de la implementación del programa federal “México te abraza”. Ante la expectativa de un aumento significativo de repatriaciones por la frontera tamaulipeca, la administración estatal ha desarrollado una serie de acciones estratégicas en colaboración con el gobierno federal y otros estados del país.

Tamaulipas, como una de las principales puertas de entrada para migrantes repatriados, ha declarado estar preparado para recibir a los connacionales, identificando escenarios posibles y coordinándose con al menos 10 estados de la República para enfrentar una posible crisis migratoria. El Instituto Tamaulipeco para los Migrantes ha señalado que el estado cuenta con siete albergues con capacidad para 20 mil personas, ubicados en Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo, además de otros cinco puntos financiados por la federación en Ciudad Madero, Victoria y la frontera. Esta infraestructura permite una atención inmediata y digna a los migrantes que regresan.