*Aun cuando la enfermedad no se ha presentado en el estado existe una estricta
vigilancia para evitar brotes y complicaciones.
VICTORIA, TAMAULIPAS.- Ante la presencia de brotes registrados en estados como Puebla
por la enfermedad de manos, pies y boca, que afecta principalmente a la población infantil,
por su alta vulnerabilidad y el riesgo de complicaciones graves, la Secretaría de Salud,
refuerza la vigilancia sanitaria y epidemiológica en el estado para evitar la presencia de
brotes.
El titulare de la dependencia estatal, Vicente Joel Hernández Navarro, señaló que este tipo de
padecimientos es provocado por un agente denominado enterovirus y es durante la
temporada de calor que suelen presentarse con mayor frecuencia, por ello la importancia de
mantener medidas como el  lavado de manos con frecuencia, limpiar y desinfectar
superficies y objetos como los juguetes, cubrirse al toser o estornudar, así como evitar el
contacto con personas infectadas.
Dijo que aun y cuando no se ha emitido una alerta epidemiológica en el país, la Organización
Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) exhortó a los
países miembros a reforzar la prevención y control de esta enfermedad, debido a que podría
estar asociada con complicaciones del sistema nervioso central en las que se incluye la
meningitis aséptica, encefalitis y parálisis flácida aguda.
Destacó que por instrucción del gobernador, Américo Villarreal Anaya, se convocó a los
intrigantes del Grupo Técnico Interinstitucional del Comité Estatal de Vigilancia
Epidemiológica, para mantener una vigilancia activa para detectar de manera oportuna la
posible ocurrencia de casos y brotes, especialmente en los grupos de riesgo como es la
población infantil.
La enfermedad de de manos, pies y boca es causada por un agente denominado
coxsackievirus y el enterovirus, que se caracteriza por la presencia de erupciones cutáneas en
las palmas de las manos y las plantas de los pies, con o sin múltiples úlceras bucales
dolorosas, pero también se pueden presentar en glúteos, rodillas o codos que suelen persistir
de 3 a 5 días tras el inicio de la enfermedad y se presenta especialmente en niños pequeños y
lactantes.
Por último recomendó a los padres, tutores y cuidadores para que lleven al niño o niña a la
clínica u hospital más cercano si se presentan signos de alarma como, que no quiera comer o
beber, si presenta vómitos o somnolencia persistente, espasmos sobresaltados o
contracciones musculares breves y fiebre.