- La salida de Iglesias de Morena abre la puerta a una posible candidatura sin partido y a un posible triunfo; sin embargo, el camino está lleno de obstáculos políticos y ciudadanos.
Por Julio Manuel Loya Guzmán.
Reynosa, Tamaulipas.- La posibilidad de que esta ciudad fronteriza sea gobernada por un candidato independiente en 2027 ha comenzado a tomar fuerza tras el reciente anuncio de Luis Miguel Iglesias, activista social y exmilitante de Morena, quien busca encabezar un proyecto autónomo alejado de los partidos tradicionales.
Aunque en México las candidaturas independientes han ganado terreno en los últimos años, su éxito ha sido más simbólico que contundente frente al poder estructural de institutos como Morena, PAN o PRI.
En Tamaulipas, por ejemplo, durante las elecciones de 2024 hubo participación de independientes en municipios como Soto la Marina y Tula, pero sin resultados trascendentes en zonas urbanas de alta competencia como Reynosa.
La ruta hacia una alcaldía independiente no es sencilla. El Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM) exige a los aspirantes sin partido cumplir con requisitos específicos, entre ellos, recolectar un número significativo de firmas de apoyo ciudadano -usualmente un porcentaje del padrón electoral- en un periodo determinado, además de establecer una estructura organizativa sólida para enfrentar a las maquinarias partidistas ya consolidadas.
Luis Miguel Iglesias, quien anunció su intención de contender de manera independiente, ha iniciado la conformación de esa estructura.
Con una trayectoria vinculada a causas sociales y una cercanía reconocida con sectores populares, Iglesias ha manifestado su deseo de promover un gobierno autónomo, pero en coordinación con los niveles federal y estatal.
“Buscamos una nueva forma de hacer política, sin intermediarios ni cuotas partidistas, solo con el respaldo directo de la ciudadanía”, declaró el activista tras formalizar su renuncia a Morena.
Sin embargo, los desafíos son numerosos. Las candidaturas independientes suelen carecer de los recursos financieros y de difusión que poseen los partidos tradicionales.
A ello se suma la importancia estratégica de Reynosa en el panorama estatal: su ubicación fronteriza, su dinamismo económico y su peso electoral la convierten en una plaza codiciada y altamente disputada.
La próxima elección municipal se celebrará en 2027, al concluir el trienio 2024-2027 que comenzó el 1 de octubre de 2024. Aunque aún faltan dos años, la carrera política ya comenzó, y el ambiente social podría jugar un papel determinante.
El éxito de un proyecto independiente dependerá, entre otros factores, del nivel de organización, del hartazgo ciudadano hacia los partidos políticos y del contexto electoral en ese momento. Iglesias y otros posibles aspirantes tendrán que capitalizar ese posible descontento y transformarlo en votos.