Columna Opinión Económica y Financiera.
Dr. Jorge A. Lera Mejía.
La Laguna de Champayán, ubicada en el municipio de Altamira, Tamaulipas, ha sido objeto de un ambicioso proyecto de desazolve y recuperación ambiental. Este esfuerzo, liderado por el gobernador Américo Villarreal Anaya y el alcalde Armando Martínez Manríquez, busca garantizar el suministro de agua potable para la población local y transformar el entorno en un espacio ecológico y turístico.
La importancia de continuar estos trabajos a largo plazo no solo beneficia a la Laguna de Champayán, sino que también impacta positivamente en toda la cuenca lagunera del bajo Río Tamesí. Se convirtió en ejemplo nacional para ser tomado en cuenta para las futuras acciones de abastecer de agua dulce al centro y norte de Tamaulipas, y sea replicado en otras regiones del país.
La Laguna de Champayán, con una extensión aproximada de 213 km², es el principal cuerpo de agua dulce que abastece a la población de Altamira para uso doméstico, público, comercial e industrial. Sin embargo, durante años, el sistema lagunario estuvo abandonado, lo que provocó su azolvamiento y una disminución significativa en su capacidad de captación de agua. Esta situación se agravó por las sequías recurrentes en la región, que han afectado severamente los niveles de agua en los últimos años.
Los trabajos de desazolve en la Laguna de Champayán han avanzado significativamente. Se han retirado aproximadamente 700 mil metros cúbicos de azolve, lo que ha mejorado la profundidad del vaso lacustre y aumentado su capacidad de captación de agua. Además, se ha logrado eliminar los malos olores y mejorar el entorno ambiental en áreas como las ex lagunas de oxidación, que ahora se están transformando en espacios ecológicos y turísticos.
El alcalde Martínez Manríquez ha destacado el compromiso del gobierno municipal con este proyecto, que no solo busca mejorar el suministro de agua, sino también repoblar la fauna y conservar el recurso hídrico para las generaciones futuras. La colaboración con el gobierno estatal, liderado por el gobernador Américo Villarreal Anaya, ha sido crucial para avanzar en estos esfuerzos, especialmente con la facilitación de una segunda draga que ha ayudado a enfrentar la crisis hídrica.
El impacto de estos trabajos es multifacético. No solo se ha asegurado el suministro de agua potable para más de 82,000 usuarios y 74 empresas industriales, sino que también se ha mejorado la calidad de vida de la población al reducir la contaminación y crear espacios recreativos. Además, el proyecto ha sido reconocido a nivel nacional, recibiendo apoyo de autoridades federales para su continuación.
Para que estos esfuerzos tengan un impacto duradero, es crucial que los trabajos de desazolve y recuperación ambiental continúen a largo plazo. Esto no solo beneficiará a la Laguna de Champayán, sino que también contribuirá al bienestar de toda la cuenca lagunera del bajo Río Tamesí. La colaboración entre la sociedad, los empresarios, el municipio de Altamira, los tres municipios conurbados, y el gobierno estatal es esencial para asegurar que estos proyectos sean sostenibles y efectivos.
Es fundamental mantener el ritmo actual de desazolve para asegurar que la laguna siga siendo un recurso hídrico confiable.
Fortalecer la colaboración entre la sociedad, el gobierno municipal, estatal y federal para asegurar el financiamiento y el apoyo técnico necesario.
Transformar las áreas recuperadas en atractivos turísticos ecológicos puede generar ingresos y conciencia ambiental.
Implementar programas de educación ambiental para involucrar a la comunidad en la conservación del sistema lagunario.
Establecer un sistema de monitoreo para evaluar el progreso y ajustar las estrategias según sea necesario.
El desazolve de la Laguna de Champayán es un ejemplo de cómo la acción concertada entre diferentes niveles de gobierno y la comunidad puede transformar un entorno ambiental crítico en un recurso vital y sostenible. Para asegurar el éxito a largo plazo de este proyecto, es esencial que los esfuerzos se mantengan y se expandan a toda la cuenca lagunera del bajo Río Tamesí. La colaboración Interinstitucional debe continuar, con el apoyo de los municipios conurbados, el estado y las autoridades federales, para garantizar un futuro más próspero y sostenible para la región.
El gobernador Américo Villarreal Anaya, incluirá en su Tercer informe de labores desde el Polyforum del puerto de Tampico el próximo 15 de marzo, enfatizando estas acciones integrales de sustentabilidad y sostenibilidad ambiental que son un ejemplo nacional de las medidas urgentes para dar respuesta al cambio climático y la necesidad de atender de forma comunitaria por la sociedad y los tres órdenes de gobierno para dar viabilidad al recurso hídrico de la región, anticipando ante una nueva crisis de escasez del agua.
Vale recordar que el 24 de junio de 2024, fue superada la emergencia hídrica gracias a la lluvia extraordinaria que dejó a su paso la tormenta tropical Alberto.
En esa ocasión, los colonos de Tampico, Madero y Altamira entregaron un reconocimiento por el liderazgo al Dr. Américo Villarreal Anaya en la superación de la crisis hídrica del estiaje del verano, destacando su compromiso y cercanía con la población afectada.
Además, la comunidad valoró su determinación y conocimiento en el manejo de la crisis, lo que marcó una diferencia significativa en la región.