Por Julio Manuel Loya Guzmán.
Reynosa, Tamaulipas.- La reciente imposición de aranceles del 25% a todos los productos provenientes de México por parte de Estados Unidos, a encendido las alarmas en el sector comercial de la frontera, pues se prevé la pérdida de empleos y el cierre de empresas.

De acuerdo con la Federación de Cámaras de Comercio (FECANACO) en Tamaulipas, esta medida representa un golpe directo al intercambio comercial con Estados Unidos, afectando gravemente la economía regional y poniendo en riesgo miles de empleos, reveló su secretario Roberto Cruz Hernández.

El líder empresarial, advirtió que las consecuencias de esta decisión serán devastadoras para ambos lados de la frontera. “Con estas medidas no hay ganadores. La recaudación por aranceles no compensará el daño económico ni la pérdida de competitividad frente a otras regiones del mundo, como Asia e India”, señaló.

La relación comercial entre México y Estados Unidos ha sido clave para el crecimiento económico de la frontera, permitiendo la optimización de costos y una mayor eficiencia productiva. No obstante, el encarecimiento de las exportaciones mexicanas podría provocar inflación, caída del consumo y cierre de empresas en la región.

Entre los sectores más afectados destacan:

  • Aumento de precios en EE.UU.: Productos esenciales como frutas, verduras, cerveza, electrodomésticos, automóviles y autopartes encarecerán para los consumidores estadounidenses.
  • Desincentivo a la inversión en México: La incertidumbre generada por los aranceles afectará la confianza de inversionistas nacionales y extranjeros, debilitando la producción de bienes y servicios.
  • Pérdida de empleos y cierre de empresas: Varias compañías podrían reducir sus operaciones o incluso cesar actividades, impactando a miles de trabajadores en ambos países.
  • Menor consumo y desaceleración económica: La reducción del poder adquisitivo de la población afectará las ventas y la actividad comercial en general.

Cruz Hernández lamentó que México no haya previsto un escenario de esta magnitud. “Nos enfrentamos a una crisis comercial sin precedentes que nos toma en un momento político complicado, donde muchas de las reformas aprobadas recientemente no generan certeza a las inversiones”, subrayó.

Ante este nuevo panorama, el comercio organizado en Tamaulipas ha comenzado a diseñar estrategias para mitigar el impacto de los aranceles y fortalecer la economía local. Entre las principales acciones destacan:

  • Impulso al consumo local: Fomentar la compra de productos nacionales para reactivar el mercado interno.
  • Digitalización de comercios: Expandir la presencia de los negocios en plataformas digitales para diversificar mercados y aumentar ventas.
  • Capacitación empresarial: Brindar herramientas a empresarios y emprendedores para mejorar su resiliencia ante crisis económicas.
  • Gestión de incentivos fiscales: Promover programas de apoyo para evitar el cierre de empresas y la pérdida de empleos.

“El reto es enorme, pero no tenemos otra opción más que adaptarnos y fortalecer nuestra economía local. Es momento de unir esfuerzos entre el sector público y privado para encontrar soluciones que amortigüen el impacto de estas medidas arancelarias”, concluyó Cruz Hernández.